El presidente Hugo Chávez promulgó este sábado la polémica ley que regula el alquiler de viviendas y que de acuerdo con los propietarios de imnmuebles, entre los cuales destacan habitantes de los sectores populares, acabará con el mercado inmobiliario en el país, ya que la norma protege en todo momentro al inquilino sobre la persona que le arrienda una habitación, apartamento o casa.
"Un aplauso para todos los diputados y diputadas que trabajaron en esta Ley para la Regularización y Control de los Arrendamientos de Viviendas, vamos a promulgarla de inmediato”, dijo Chávez en acto transmitido en cadena de radio y televisión, al firmar el texto y crear asimismo un fondo "para ayudar a los inquilinos a convertirse en propietarios".
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“Estoy seguro de que no se dejarán envenenar por los ataques de la burguesía. La ley es para protegerlos y darles seguridad jurídica”, dijo el mandatario a los asistentes al acto, desestimando las críticas que aseguran que esta legislación acabará con las rentas inmobiliarias.
La ley fue aprobada a finales de octubre por la mayoría oficialista de la Asamblea Nacional, a pesar de advertencias de los diputados de oposición que aseguraron que el nuevo texto legal viola el derecho a la propiedad. Entre las disposiciones más polémicas figuran el impuesto a las viviendas desocupadas, limitación de la rentabilidad anual, la potestad del Estado de determinar el canon de arrendamiento y las trabas para que el propietario recupere su vivienda de manos del inquilino.
En un gesto absolutamente electoral, Chávez firmó también el decreto para crear el fondo que facilitará créditos a las familias que estén alquiladas desde hace muchos años para comprar las viviendas en las que residen, y hasta fundó una "empresa inmobiliaria del Estado" para adquirir, enajenar y traspasar viviendas, entre otras funciones.
Chávez sostuvo que solucionar la crisis habitacional "ha sido una las prioridades de mi gobierno", razón por la cual este año lanzó el programa especial para compensar en los próximos seis años un déficit de unos 2 millones de viviendas.
“Lo que nosotros queremos es no perder ni un día, por eso hoy estamos promulgando la ley”, dijo el Presidente sobre la ley que, según el gobierno, provino de la iniciativa popular.
Según los oficialistas, la nueva legislación favorecerá a unas 750.000 familias que alquilan viviendas, mientras que los opositores destacan que responde a “la incapacidad del gobierno” de cumplir su meta de construcción de nuevas viviendas.
Cort. TalCualDigital
"Un aplauso para todos los diputados y diputadas que trabajaron en esta Ley para la Regularización y Control de los Arrendamientos de Viviendas, vamos a promulgarla de inmediato”, dijo Chávez en acto transmitido en cadena de radio y televisión, al firmar el texto y crear asimismo un fondo "para ayudar a los inquilinos a convertirse en propietarios".
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“Estoy seguro de que no se dejarán envenenar por los ataques de la burguesía. La ley es para protegerlos y darles seguridad jurídica”, dijo el mandatario a los asistentes al acto, desestimando las críticas que aseguran que esta legislación acabará con las rentas inmobiliarias.
La ley fue aprobada a finales de octubre por la mayoría oficialista de la Asamblea Nacional, a pesar de advertencias de los diputados de oposición que aseguraron que el nuevo texto legal viola el derecho a la propiedad. Entre las disposiciones más polémicas figuran el impuesto a las viviendas desocupadas, limitación de la rentabilidad anual, la potestad del Estado de determinar el canon de arrendamiento y las trabas para que el propietario recupere su vivienda de manos del inquilino.
En un gesto absolutamente electoral, Chávez firmó también el decreto para crear el fondo que facilitará créditos a las familias que estén alquiladas desde hace muchos años para comprar las viviendas en las que residen, y hasta fundó una "empresa inmobiliaria del Estado" para adquirir, enajenar y traspasar viviendas, entre otras funciones.
Chávez sostuvo que solucionar la crisis habitacional "ha sido una las prioridades de mi gobierno", razón por la cual este año lanzó el programa especial para compensar en los próximos seis años un déficit de unos 2 millones de viviendas.
“Lo que nosotros queremos es no perder ni un día, por eso hoy estamos promulgando la ley”, dijo el Presidente sobre la ley que, según el gobierno, provino de la iniciativa popular.
Según los oficialistas, la nueva legislación favorecerá a unas 750.000 familias que alquilan viviendas, mientras que los opositores destacan que responde a “la incapacidad del gobierno” de cumplir su meta de construcción de nuevas viviendas.
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