El Bella Center de Copenhague acoge la
cumbre del cambio climático
EEUU ha conseguido un "acuerdo significativo" con China, India y Sudáfrica para un pacto contra el cambio climático. Según un alto funcionario estadounidense el acuerdo obtenido no es en sí suficiente para luchar contra el cambio climático pero sí representa "un primer paso importante".
El pacto aporta un mecanismo para supervisar y verificar los recortes de emisiones en los países en desarrollo pero fija unos objetivos menos ambiciosos de lo que esperaban inicialmente EEUU y los países europeos.
EEUU ha conseguido un "acuerdo significativo" con China, India y Sudáfrica para un pacto contra el cambio climático. Según un alto funcionario estadounidense el acuerdo obtenido no es en sí suficiente para luchar contra el cambio climático pero sí representa "un primer paso importante". Un "avance" que para el presidente de los EEUU, no tiene "precedentes y es significativo".
El alto funcionario de los EEUU , ha señalado que el acuerdo se logró tras un encuentro del presidente estadounidense con el presidente sudafricano, Jacob Zuma, y los primeros ministros de India y China, Manmohan Singh y Wen Jiabao.
El pacto aporta un mecanismo para supervisar y verificar los recortes de emisiones en los países en desarrollo pero fija unos objetivos menos ambiciosos de lo que esperaban inicialmente EEUU y los países europeos.
Ninguno de los países está completamente satisfecho con lo logrado pero el acuerdo representa, insistió el alto funcionario, un "paso histórico" que servirá de base para pactos más sustanciales en el futuro.
Sí mantiene el objetivo de limitar el aumento de la temperatura terrestre a dos grados, como buscaban europeos y estadounidenses. También incluye un acuerdo sobre la financiación que aportarán los países más ricos a las economías en vías de desarrollo para su adaptación al uso de tecnologías limpias.
La delegación brasileña ha expresado su "decepción" por el acuerdo alcanzado porque consideran que "no es el resultado" que esperaban. "Estamos muy decepcionados. No es el acuerdo que esperábamos pero al menos es un acuerdo que nos permitirá salvar algo y seguir negociando el año próximo las cifras que no han podido cerrarse", explicó el embajador de la delegación brasileña, Sergio Serra.
Serra apuntó que el principal escollo era la formulación de ese punto del texto, que aludía a mecanismos de "examen y valoración", unos términos a los que China se opuso de forma tajante. Criticó también la falta de compromiso de los países ricos y el hecho de que "no pusieran cifras definitivas sobre la mesa".
El presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, por su parte, aseguraba esta tarde que el proceso negociador en la Cumbre del cambio climático "no es fácil" y reconocía que "hay una ambición limitada en la reducción de emisiones" de gases de efecto invernadero por parte de diversos países emergentes.
Zapatero apelaba a la ONU para que "persevere sin descanso" a fin de lograr un compromiso que obligue a los todos países en la lucha contra el cambio climático. Defendía que el acuerdo "debe caminar hacia un tratado internacional vinculante". Decía que los países emergentes habían mostrado "una ambición aun más limitada", según Zapatero.
Abogaba por un acuerdo que incluya un compromiso de reducción global de emisiones del 50% hasta 2050, que obligue a los países ricos a reducir las suyas en un 80% , lo que garantizaría que la temperatura media del planeta no supere los dos grados hasta 2100.
'No nos podemos levantar de la mesa sin llegar a un acuerdo'
La consecución de un acuerdo en la Cumbre del Clima de Copenhague estaba este viernes por la tarde "muy complicado", respecto a los avances logrados por la mañana debido, sobre todo, al posicionamiento de China y, en menor medida, de Brasil, según la ministra de medio Ambiente y Medio Rural y Marino (MARM), Elena Espinosa, durante un receso de las reuniones que mantienen más de una veintena de jefes de Estado y de Gobierno para tratar de avanzar en las negociaciones.
Salgado ha axplicado que se vuelven a cuestionar las cifras que aparecían en el documento elaborado por la mañana y especificó que el acuerdo está más lejos en lo que se refiere a reducción de emisiones de CO2 que en lo que se refiere a financiación.
"Los esfuerzos se seguirán haciendo -agregó--. Nuestro presidente (José Luis Rodríguez Zapatero) es uno de los que está diciendo que no nos podemos levantar de aquí hasta que no alcancemos un acuerdo. Está insistiendo en que las horas que sean necesarias, pero que, por favor, nadie regrese a su países para poder cerrar este acuerdo".
Además, dijo que España trabaja con los países africanos y de América Latina para que "echen una mano" en el proceso porque son países muy vulnerables y poco desarrollados que son los que menos CO2 emiten. "Es nuestra responsabilidad ayudarles a ese crecimiento. Así lo entienden y nos están ayudando en este proceso de tratar de darle la vuelta a una situación muy complicada que tenemos", remarcó.
Espinosa espera, además, que las diferencias con Brasil puedan salvarse tras la llegada a las negociaciones de especialistas de este país.
Por otro lado, el presidente estadounidense, Barack Obama, ha invitado al primer ministro chino, Wen Jiabao, a mantener otra reunión este viernes para discutir sobre las cuestiones principales del acuerdo que se negocia en Copenhague y el jefe del Ejecutivo chino ha aceptado la propuesta, según informó la Casa Blanca en un comunicado. China y Estados Unidos son los dos principales emisores de gases de efecto invernadero y en parte depende de ellos que la cumbre de Copenhague culmine con éxito, es decir, con un acuerdo internacional para combatir el calentamiento global.
Los países de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA), por su parte, han dejado claro que no suscribirán el documento final de la cumbre porque ha sido elaborado por una veintena de países encabezados por Estados Unidos al margen del resto en una reunión privada.
Por otro lado, hemos podido saber que el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, junto con la ministra de Medio Ambiente, Rural y Marino, Elena Espinosa, permanecieron toda la noche del jueves al viernes negociando con otros 26 mandatarios para alcanzar un acuerdo climático en el marco de la Cumbre del Clima de Copenhague.
Según informaron fuentes de la delegación española, tras la cena oficial que organizó la reina de Dinamarca, Margarita II, para los más de 120 jefes de Estado y Gobierno presentes en esta cita, se iniciaron reuniones de uno a uno entre 24 países, más la ONU y la presidencia de la UE y la Comisión Europea.
Además de España, estuvieron presentes Argelia, Australia, Bangladesh, Brasil, China, Colombia, Etiopía, México, Alemania, Francia, Granada, India, Indonesia, Corea, Maldivas, Noruega, Rusia, Sudán, Reino Unido, Estados Unidos, Lesoto, Sudáfrica y Arabia Saudí.
Por su parte, el director ejecutivo de Oxfam Internacional, Jeremy Hobbs ha criticado hoy que en la Cumbre de Copenhague "todo se ha dejado para discutir en el último día" y reclamó "una acción garantizada y más sustancia", pues la organización no quiere un acuerdo basado "sólo en la confianza".
"Los rumores que circulan en Copenhague hablan de un acuerdo político que mantenga el calentamiento global por debajo de los 2C, pero nadie está hablando de la escala de reducción de emisiones necesaria para conseguirlo", ha expresado Hobbs.
Tomado de: cope.es/mundo/18-12-09
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