Sharon, de 85 años, ya está en coma durante ocho años después que sufrió un ataque de apoplejía que lo incapacitó cuando se encontraba en la cúspide del poder político, lucha y que no sufre dolor, dijo el doctor Zeev Rotstein, director del hospital Tel Hashomer cerca de Tel Aviv.
Sharon es una de las figuras más icónicas y controvertidas y su carrera abarca 65 años de la historia de Israel.
Hablando el viernes con los periodistas en el hospital, Rotstein dijo que la vida de Sharon sigue en peligro y que "hay un deterioro lento y gradual", en momentos que los médicos ahora observan que no sólo los riñones de Sharon sino también otros órganos vitales tienen mal funcionamiento.
Las pruebas demuestran que Sharon también padece de una infección en la sangre, indicó Rotstein.
El director se abstuvo de dar un diagnóstico pero cuando se le preguntó si Sharon se iba a recuperar, respondió que "viendo la tendencia del deterioro no nos da buenas señales para su futuro".
La familia de Sharon estaba a su cabecera, dijo Rotstein.
Una destacada voz entre los políticos de línea dura durante décadas, fue elegido primer ministro en el 2001.
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