Mi comentario de la semana
A propósito de la referencia que Chávez hizo de mi persona en el pasado Aló Presidente. Antes de tocar el tema, debo expresar que nunca en estos 10 años me he sentido perseguido de Hugo Chávez. No encuentro motivos para considerarme así ahora; por lo tanto, aunque saludo la iniciativa de algunos de mis colegas alertándome acerca de un probable acoso, les repito que, para mí, que venga del propio Chávez me resulta impensable. Ambos tenemos diferencias políticas discutibles y moldes distintos; sin embargo, ello no implica que no exista un sentimiento de respeto, del uno por el otro. Puede que en medio del fragor de la verborrea se digan cosas un tanto fuera de tono, pero de ahí a suponer que Chávez ordenaría que se me detenga inventando cualquier excusa, no es verdad.