Este 1º de abril entró en vigencia la regulación de los 19 productos anunciados por el Gobierno, aún hay comercios que no se han ajustado del todo. Sin embargo, la providencia les da un mes más para hacerlo
KEILYN ITRIAGO MARRUFO/TalCualDigital
Cuando ayer Mariela Camacho fue a hacer su acostumbrado mercado dominguero notó que el jabón de ropa, el cloro y el papel sanitario estaban por debajo del precio habitual, pero no fue así cuando se dirigió al anaquel de los champús y enjuagues. Y es que pese a que este 1º de abril entró en vigencia la regulación de los 19 productos anunciados por el Gobierno, aún hay comercios que no se han ajustado del todo. Sin embargo, la providencia les da un mes más para hacerlo.
Uno de los empleados de la sucursal del Excelsior Gama de Los Palos Grandes dijo haber visto a los funcionarios de la Superintendencia Nacional de Costos y Precios (Sundecop) chequear de manera aleatoria los precios de las mercancías exhibidas en el negocio. Además, fue testigo de algunos llamados de atención a los gerentes del lugar.
Luego de su paso por el supermercado, los representantes de Sundecop dejaron un paquete de folletos con el listado de los precios máximos de venta al público para que sean los mismos consumidores los contralores del ajuste.
Mientras tanto, sigue reposando en la entrada del local la etiqueta que da por sentado la visita en días pasados, mostrando un "check" en el óvalo amarillo que indica "Alerta ¡Ajustable!"; las otras dos opciones rojo y verde, indican "No cumple" y "Sí cumple, respectivamente.
En total, fueron 82 los establecimientos comerciales de la capital que fueron fiscalizados, según anunció la titular del despacho, Karlin Granadillos, quien advirtió que desde ya pueden comenzar a aplicarse las sanciones que incluyen el cierre temporal y el pago de 15 salarios mínimos en adelante. Por ahora, serán los grandes comercios los que serán objetos de auditorías, de acuerdo a lo que explicó el vicepresidente de la República, Elías Jaua.
ADIÓS A LA VARIEDAD
Mauricio Tancredo, vicepresidente de Consecomercio, está seguro de que esta medida, que corresponde a la aplicación de la primera fase de la Ley de Costos y Precios Justos, tendrá el efecto contrario a lo que se está buscando, que es aplacar la inflación, ampliar la oferta de mercado y reducir el desabastecimiento.
A su juicio, los productos tenderán a desaparecer de los anaqueles porque las políticas de control empobrecen la calidad de la oferta. "Lo ideal es tener 8 o 10 marcas diferentes de un champú, un jabón o de un jugo pasteurizado, pero en este caso la variedad no va a ser la misma y el cliente tendrá que escoger uno o dos productos", agrega.
Según Tancredo, las cadenas grandes, que tienen entre 15 mil y 18 mil productos, tendrán más posibilidades de enfrentar esto, pero no así los pequeños negocios, quienes no podrán ponderar los precios y serán los más afectados.
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