lunes, 8 de septiembre de 2014

La fantasía de Conatel

Lástima que no sea Conatel la que rige en el Ministerio de Interior y Justicia. Lástima que no se ponga el mismo empeño en censurar a los medios, que el que se coloca en atacar la inseguridad del país

SANTIAGO BOCCANEGRA/TalCualDigital
Afuera de la casa se escucha el zumbar de las balas. Una de ellas pegó en la esquina de uno de los ladrillos sin pintar. Ana sabe lo que son, pero a su pequeño hijo le ofrece una mentira piadosa, le dice que son fuegos artificiales. En el cuarto están bien protegidos, sube el volumen de la televisión para disimular el ruido.

Son las 9 de la noche, hora de la telenovela estelar que acostumbra ver Ana. Están estrenando una nueva teleserie, Nora, del venezolano Ibsen Martínez.

El escritor decidió darle espacio a un conflicto entre policías y pranes para enmarcar su historia de amor. Hay tensión, los privados de libertad tienen secuestrada a la protagonista. Comerciales. Ya todo esta resuelto. La historia se resolvió sin que se disparara un tiro. Nada de eso. El televidente debe inferir todo el resto.

La historia de Ibsen Martínez la comenzó a transmitir Televen la semana pasada. La vivencia de Ana es la crónica de muchas familias en los barrios de Caracas: llegado el toque de queda no hay más remedio que encerrarse en casa y disimularle a los pequeños la inseguridad y el miedo.

En la ficción, sin embargo, no se puede hacer sonar ninguna pistola. Esta prohibido, es la ley de la censura ­y autocensura, hay que decirlo­ que impone Conatel. Allí en la televisión los hijos de Ana no ven nada altisonante. Hasta las palabras escatológicas se censuran.

Lástima que no sea Conatel la que rige en el Ministerio de Interior y Justicia. Lástima que no se ponga el mismo empeño en censurar a los medios, que el que se coloca en atacar la inseguridad del país. Lástima que el Gobierno quiera inventar un país de mentira, a punta de fantasía... Lástima que, en muchos casos, la bala perdida sí entra en la casa, golpea el televisor y se instala en el cuerpo de algún inocente.

1 comentario: