Se trata de la abogada y ex funcionaria del CNE, Kimy Alsina, y de su hija Oriana Monasterios. Ambas mujeres habrían sido raptadas y ajusticiadas por sicarios
Funcionarios de la medicatura forense identificaron los cadáveres de las dos mujeres que fueron hallados en Parque Caiza, quemados y con signos de haber recibido varios disparos.
Extraoficialmente, se trata de Kimy Alsina, de 52 años de edad, abogada y funcionaria jubilada del Consejo Nacional Electoral, y conocida en el ámbito político por su militancia de muchos años en el MAS.
El otro cadáver corresponde a su hija, Oriana Monasterios, de 20 años de edad, quien había cursado Derecho en la Universidad Santa María y se había retirado para estudiar Diseño Gráfico. Ambas vivían solas en un edificio de San Bernardino.
Efectivos de Polimiranda y de Polisucre que actuaron junto a funcionarios del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas en el levantamiento de los cadáveres presumen que las damas habrían sido golpeadas fuertemente, además de presentar impactos de bala. En el caso de Alsina se dice que fue quemada viva, mientras que a su hija la ejecutaron con cinco disparos de pistola.
Sus cadáveres fueron avistados el miércoles en la mañana por residentes de Parque Caiza y, según testimonios, los cuerpos estaban amordazados y maniatados, cerca de la torre Viasa, en una zona boscosa donde ya se han encontrado en lo que va de año otros cinco cuerpos sin vida en condiciones semejantes.
Según información recabada entre expertos policiales, el caso muestra características de un sicariato, no se sabe si como secuela de resistencia a un secuestro –al parecer ambas víctimas fueron sacadas a la fuerza de su apartamento– o como un acto de ejecución por venganza. “Quemarlas vivas y maltratarlas de esa manera da la impresión de que se trató de un acto de venganza con mucha violencia y odio atravesado”, lamentó el ex ministro de Salud Rafael Orihuela, quien militó con Alsina en el MAS en los años 80.
Kimy Alsina era ampliamente conocida en el MAS, ya que se contó como militante de ese partido entre los años 70 y 90, además de laborar en el CNE, donde mantuvo vínculos amistosos con dirigentes políticos y gubernamentales.
Desde bachillerato militó en la izquierda, y fue en 1972 pasó a ser dirigente juvenil del MAS. Años después, fundó la Dirección de Planificación del CNE, junto a Felipe Mujica e Iván Esquerre. Hace cinco años, se jubiló y, desde ese momento, dedicó su vida a su familia. Estuvo casada primero con el dirigente político Manuel Vizcuña y luego con el “maestro Santiko”, con quien tuvo a su hija Oriana. Fuentes extraoficiales aseguran que los padres de la joven mantenían una buena relación y que él fue quien identificó el cadáver de su hija por unos tatuajes que tenía.
Tomada de: Tal Cual Digital
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