No saben cuándo partir

Existen formas de actuación similares en los tiranos y dictadores comunistas, que se manifiestan con más claridad en el alba de su defenestración

Por: Gonzalo García Ordóñez/TalCualDigital
Existen formas de actuación similares en los tiranos y dictadores comunistas, que se manifiestan con más claridad en el alba de su defenestración. Mubarak, después de 30 años en el poder, con intención negada de continuar, quería que su hijo Gamal heredara “el trono de Faraón”.

En Libia aparece el hijo de Gadafi desafiante y amenazador, su padre tiene 41 años en el poder, contra quienes quieren libertad y democracia. Otro elemento común en los tiranos y dictadores comunistas es el de la corrupción.

Las últimas informaciones disponibles dan cuenta de la fortuna del clan Mubarak, 30 mil millones de euros, en medio de tanta miseria y necesidades del pueblo egipcio. Su esposa tiene una mansión de 10 millones de euros en Londres.

Al derrocado Ben Ali, ex dictador de Túnez, le encuentran en el palacio presidencial inmensas cantidades de dinero, oro, diamantes, piedras preciosas y una fortuna en bancos suizos calculada en más de 30 millones de euros, sin contar la fortuna de su corrupta mujer.

Ahora le tocó el turno al infame dictador y terrorista internacional Mohamed Gadafi adueñado de Libia, de sus habitantes y con línea sucesora en su hijo. La comunidad internacional está tomando acciones para congelar los fondos Gadafi en bancos internacionales.

Pero no es solo en el Medio Oriente dónde clanes y familias se han repartido la tierra, habitantes y riqueza, también encontramos el fenómeno en Asia siendo el más relevante la dictadura comunista y sanguinaria de Corea del Norte encarnada en una familia que llegó al poder en 1948.

En Sudán, el dictador de turno a raíz de un golpe de estado en 1989 y desde entonces en el poder, Omar Al Bashir, anunció que no será candidato en el 2015. Hay protestas  contra Al Bashir para que abandone la escena política y decenas de presos sea liberados.

En Yemen, Alí Abdalá Saleh está en el poder desde hace 32 años, y sólo ha sido bajo la presión de la calle que aceptó no presentarse a unas nuevas elecciones previstas para el 2013. Miles de personas continúan en huelga contra el régimen.

En Cuba, el feroz régimen comunista impuesto por los hermanos Castro desde hace más de 50 años, mantienen secuestradas las libertades y garantías. Un régimen corrupto, sanguinario, violador de los derechos humanos que ha sumido a los cubanos en la más absoluta pobreza. Hoy existen en la isla movimientos de protesta contra el régimen que se ha visto obligado a liberar presos políticos y abrir espacio a la iniciativa propia y propiedad privada.

En Venezuela el presidente HCH, en el poder desde 1999, desconociendo la voluntad popular expresada en el Referendo Constitucional que negó la reelección indefinida, pretende presentarse como candidato a las elecciones presidenciales en el 2012. Más allá de los estudios de opinión que señalan que está en minoría y será derrotado en las urnas electorales, existe una voluntad y determinación en la población para ponerle punto final al comunismo en Venezuela.

@gongaro