Gina Domínguez, portavoz del gobierno del estado de Veracruz (este), dijo que el grupo de pistoleros dio muerte a cuatro personas y luego atacó a tres autobuses que circulaban por una carretera cerca del poblado de Pánuco, donde murieron siete pasajeros.
"Lamentablemente tenemos siete personas fallecidas en los autobuses" atacados por los pistoleros, indicó a la prensa Domínguez, quien no precisó a qué grupo específico pertenecían los pistoleros.
De acuerdo con un comunicado de la secretaría de la Defensa, el comando primero asesinó a balazos a tres personas "que se encontraban cargando una camioneta de verduras y en otro punto de la población (El Higo, Veracruz) arrojaron una granada provocando la muerte de una persona más".
Posteriormente, cerca de esa localidad "asaltaron un autobús en donde asesinaron a dos pasajeros", narró la dependencia.
Los pistoleros "continuaron sobre la misma carretera para detener un segundo autobús sobre el que efectúan disparos de armas de fuego, ocasionando el fallecimiento de otras cuatro personas", el chofer de un tercer autobús que se detuvo para prestar auxilio también fue asesinado, indicó Sedena.
Fue entonces que los militares arribaron al lugar quienes fueron recibidos con ráfagas. Después de una corta balacera los militares abatieron a "cinco agresores", concluyó la Sedena.
El gobierno federal mantiene desplegado hace más de dos meses a fuerzas militares y de policía para contener la violencia en Veracruz, un estado sobre la costa del golfo de México, que ha vivido este año un incremento de la violencia atribuido especialmente a acciones de células del cartel de Los Zetas desplazadas hacia el sur desde el vecino estado de Tamaulipas (noreste).
El miércoles las autoridades habían anunciado el desmantelamiento de la policía local en la zona metropolitana del puerto de Veracruz.
La Marina Armada asumió las funciones que cumplían allí unos 900 agentes, en una medida para contrarrestar al alto grado de corrupción e influencia de los carteles en esa fuerza policial.
Decenas de policías han sido detenidos por sospechas de vínculos con Los Zetas, un cartel creado por militares que desertaron en los años 90 para trabajar con el cartel del Golfo, al que ahora están enfrentados.
El ataque a los autobuses ocurre además mientras comenzaba la movilización de millones de mexicanos que suelen viajar por carretera a sus lugares de origen para pasar las fiestas de Navidad y fin de año, entre ellos cerca de tres millones residentes en Estados Unidos.
Las autoridades mexicanas habían anunciado un esquema de seguridad para proteger las carreteras entre el 16 de diciembre y el 8 de enero, que incluía a 12.000 policías federales, 3.800 patrullas, ocho helicópteros y 19 ambulancias.
En octubre, el gobierno del presidente Felipe Calderón había iniciado la aplicación de una estrategia para garantizar la seguridad de Veracruz que incluía el envío de miles de policías y militares y la creación de un mando único en la zona.
El gobierno del estado de Veracruz, que por varios meses había minimizado la gravedad de la situación, aceptó este despliegue de tropas federales después de una serie de matanzas que dejaron unos 90 muertos a fines de septiembre y comienzos de octubre.
La más impactante de ellas fue el descubrimiento el 20 de septiembre de 35 cadáveres arrojados en dos camionetas bajo un puente vial cerca de un hotel donde al día siguiente se iban a reunir los fiscales regionales del país.
El 6 de octubre, otros 32 cadáveres fueron hallados en un operativo militar que permitió detener a 12 miembros de un grupo autodenominado 'Matazetas', que según las autoridades había sido enviado por el cartel de Sinaloa, del capo Joaquín 'El Chapo' Guzmán -considerado el delincuente más poderoso de México- para contrarrestar a Los Zetas.
Soldados mexicanos patrullando en Veracruz. Un total de 16 personas murieron este jueves en un ataque de pistoleros y la reacción de las fuerzas de seguridad en una carretera del estado de Veracruz, este de México, entre ellos siete pasajeros de tres autobuses, en la antesala de las fiestas navideñas que movilizan a millones de mexicanos.
Marines mexicanos escoltan a un grupo de 18 supuestos policías municipales que trabajaban, en realidad, para el cártel de los Zetas, en Veracruz, el 4 de octubre de 2011. Decenas de policías han sido detenidos por sospechas de vínculos con Los Zetas, un cartel creado por militares que desertaron en los años 90 para trabajar con el cartel del Golfo, al que ahora están enfrentados.
Un marine mexicano patrulla las calles de Boca del Río (Veracruz), este jueves. El gobierno federal mantiene desplegado hace más de dos meses a fuerzas militares y de policía para contener la violencia en Veracruz, un estado sobre la costa del golfo de México, que ha vivido este año un incremento de la violencia atribuido especialmente a acciones de células del cartel de Los Zetas desplazadas hacia el sur desde el vecino estado de Tamapulipas (noreste).
Vista general del puente vial en el que aparecieron 35 cuerpos el pasado 20 de septiembre en Boca del Río (Veracruz). El gobierno del estado de Veracruz, que por varios meses había minimizado la gravedad de la situación, aceptó este despliegue de tropas federales después de una serie de matanzas que dejaron unos 90 muertos a fines de septiembre y comienzos de octubre.
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