La nave de la aerolínea comercial Aires, que había partido a la medianoche de Bogotá, se estrelló a la 1:49 de la madrugada (0649 GMT) mientras se aproximaba a la pista de la isla de San Andrés, sobre las aguas del mar Caribe y a unos 1.780 kilómetros al norte de Bogotá.
"La pericia del piloto evitó que la nave chocara con el aeropuerto", dijo en diálogo telefónico el coronel David Barrero, comandante del Grupo Aéreo del Caribe, de la Fuerza Aérea colombiana, con sede en San Andrés.
Agregó que se investigan las causas del accidente de la nave de Aires, con un vuelo diario desde Bogotá a la isla. Versiones de la aeronáutica de San Andrés y tripulantes del avión mencionan que un rayo, en medio de la fuerte tormenta eléctrica, pudo haber alcanzado la nave.
De los 131 ocupantes del avión —seis tripulantes y 125 pasajeros, entre ellos cuatro menores de edad, incluso un bebe de año y medio— murió una pasajera: Amar Fernández de Barreto, de 65 años.
Al menos cinco personas más resultaron con heridas graves y eran atendidas en hospitales de San Andrés, una isla de unos 78.000 habitantes principalmente dedicadas al turismo, aseguró en entrevista telefónica Pedro Gallardo, gobernador de San Andrés.
Fue "pericia, un milagro y hay que darle gracias a Dios", dijo el gobernador.
El coronel Barrera dijo que la pista de 2.300 metros de extensión estaba cerrada porque restos de la nave estaban esparcidos en una sección de al menos 600 metros.
Hasta ahora se desconoce cuándo exactamente podría reabrirse la pista del aeropuerto para vuelos comerciales, informó el oficial.
El general de la Policía Orlando Páez dijo telefónicamente que un grupo de policías, que esperaba la llegada del vuelo de Aires para regresar a Bogotá, ayudó en el rescate de los pasajeros y destacó la rápida acción de los bomberos en el aeropuerto porque controlaron el inicio de un incendio en una de las alas de la nave.
Cort. Diario 2001
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