A través de un comunicado, Fedeagro informa que según cifras se evidencia la continuidad de la caída de la producción en el año 2010. “Las limitaciones en abastecimiento de fertilizantes y semillas, el privilegio de las importaciones sobre la producción nacional y la política de intervenciones a la propiedad privada, son las razones que mantienen a la agricultura en una recesión sostenida de hace varios años”, reseña el texto.
A continuación comunicado completo:
Los agricultores venezolanos teníamos cifradas esperanzas en que el año 2010 nos permitiera recuperarnos del impacto de la sequía del año 2009; no obstante, los resultados del 2010 evidencian la continuidad de la caída de la producción.
De los tres cereales, solo el maíz registró un leve crecimiento con respecto al año anterior (4,6%), sin embargo, es un 43 % inferior al de la producción del año 2007, cuando el MAT contabilizó 2.995.000 toneladas. En arroz la producción de 2010 representó una caída del 31% con respecto al año anterior y 44 % con respecto al 2008 (1.056.000 toneladas); en sorgo el decrecimiento se ubicó en el 13%.
La producción de caña de azúcar alcanzó 5.800.000 t, una disminución del 20% con respecto a 2009 y un 42% inferior a la producción del año 2007 reportada por el MAT.
En café hubo una leve recuperación con respecto al año anterior (4,5%); no obstante, la producción no logra alcanzar los niveles históricos obtenidos en el año 2001, cuando se produjeron por encima de 1.600.000 quintales; (28 % de caída entre el 2010 y el 2001).
En papa, tomate y cebolla se registraron tasas de crecimiento negativas de 60, 18 y 23% respectivamente. En hortalizas solo en pimentón se registró un crecimiento del 5%. La naranja se incrementó en un 11% con respecto al año anterior, y dentro de las oleaginosas de ciclo corto, la recuperación del girasol (32%), contrasta con el decrecimiento del 11% del ajonjolí.
Estimados de producción vegetal del año 2010 en toneladas:
A continuación comunicado completo:
Los agricultores venezolanos teníamos cifradas esperanzas en que el año 2010 nos permitiera recuperarnos del impacto de la sequía del año 2009; no obstante, los resultados del 2010 evidencian la continuidad de la caída de la producción.
De los tres cereales, solo el maíz registró un leve crecimiento con respecto al año anterior (4,6%), sin embargo, es un 43 % inferior al de la producción del año 2007, cuando el MAT contabilizó 2.995.000 toneladas. En arroz la producción de 2010 representó una caída del 31% con respecto al año anterior y 44 % con respecto al 2008 (1.056.000 toneladas); en sorgo el decrecimiento se ubicó en el 13%.
La producción de caña de azúcar alcanzó 5.800.000 t, una disminución del 20% con respecto a 2009 y un 42% inferior a la producción del año 2007 reportada por el MAT.
En café hubo una leve recuperación con respecto al año anterior (4,5%); no obstante, la producción no logra alcanzar los niveles históricos obtenidos en el año 2001, cuando se produjeron por encima de 1.600.000 quintales; (28 % de caída entre el 2010 y el 2001).
En papa, tomate y cebolla se registraron tasas de crecimiento negativas de 60, 18 y 23% respectivamente. En hortalizas solo en pimentón se registró un crecimiento del 5%. La naranja se incrementó en un 11% con respecto al año anterior, y dentro de las oleaginosas de ciclo corto, la recuperación del girasol (32%), contrasta con el decrecimiento del 11% del ajonjolí.
Estimados de producción vegetal del año 2010 en toneladas:
Son muchas las razones que influyen en los resultados de la agricultura. A nuestro juicio la política comercial y dentro de ella el control de precios, su fijación a destiempo y por debajo de las estructuras de costos, las limitaciones en abastecimiento de fertilizantes y semillas, el privilegio de las importaciones sobre la producción nacional y la política de intervenciones a la propiedad privada, son las razones que mantienen a la agricultura en una recesión sostenida de hace varios años.
Venezuela depende peligrosamente en un 70% de las importaciones para alimentar a su pueblo, necesita incorporar urgentemente nuevas áreas para producir alimentos. Existen suficientes tierras subutilizadas esperando por recursos para ser desarrolladas, ¿porque entonces no se interviene esas tierras verdaderamente ociosas y se da la oportunidad de mejorar a las que ya están en producción?
Los agricultores venezolanos, somos hombres y mujeres de paz, dedicados a la actividad económica más azarosa de la economía. Nuestro trabajo creador; no solo genera empleo y producto en la regiones, es la base para el desarrollo regional y el progreso de la nación. Demandamos la solidaridad de los entes gubernamentales y no la política de intervención de fincas productivas, que nos alejará más de obtener resultados positivos en el Sector.
Exhortamos a las autoridades del Ejecutivo Nacional a unir fuerzas para enfrentar el reto de crecer y apuntalar el desarrollo y a concentrarse en la formulación y puesta en práctica de una política reactivadora para el Sector Agrícola, dirigida a hacernos soberanos desde el punto de vista agroalimentario, y disminuir, a lo estrictamente necesario, la dependencia de las importaciones de alimentos.
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