fuerte concentración de monóxido de carbono en las instalaciones del terminal Río Tuy

Transportistas utilizan mascarillas para protegerse del monóxido de

 carbono ÁNGEL DEJESÚS

VALENTINA OVALLES R. |  EL UNIVERSAL

Tras dos semanas de su inauguración, el modo de operaciones del terminal Río Tuy va tomando forma. Sin embargo, la mayor preocupación entre transportistas, usuarios y autoridades es la fuerte concentración de monóxido de carbono en las instalaciones del terminal de pasajeros y así lo confirmó el presidente del Cabildo Metropolitano, Luis Velásquez, ayer en rueda de prensa. 

El concejal Velásquez denunció los altos índices de contaminación en el lugar y de los cuales son víctimas los transportistas, usuarios y quienes hacen vida alrededor del Centro Simón Bolívar. 

"Los colectores han empezado a utilizar mascarillas como forma de resguardar su salud", relató el representante del Cabildo Metropolitano. 

El presidente del cuerpo legislativo realizó una inspección ocular, con varias visitas al sitio, en las que constató que los extractores no son suficientes para la cantidad de monóxido de carbono, al igual que los canales de ventilación, que no son los más adecuados. 

El concejal resaltó otras fallas del lugar, como la ausencia de accesos para personas con discapacidad, ya que el ascensor que se disponía para tal fin no se encuentra en funcionamiento; y la falta de asfaltado en los accesos al terminal. 

Velásquez criticó las carencias de la obra en relación con la gran cantidad de recursos que fueron invertidos. En el 2007, con la administración de Juan Barreto, la inversión alcanzó Bs 16 millones y para el momento de su inauguración, el pasado 22 de agosto, la cifra superaba los Bs 45 millones. 

"Nosotros apoyamos el terminal. Lo que rechazamos es que el Gobierno siga inaugurando obras inconclusas o que no cuentan con todos los elementos como para que su funcionamiento beneficie al colectivo", indicó Velásquez, quien informó que tras la inspección se realizó un informe que pretenden entregar a la Contraloría General de la República para denunciar los recursos mal invertidos en dicha obra. 

El concejal hizo énfasis en que el terminal no presenta las condiciones como para que los transportistas puedan trabajar y atenta contra su salud, por lo cual la institución luchará para que los trabajadores del volante sean atendidos en su petición y puedan trabajar en "un ambiente sano". 

"Mientras continúe funcionando así el terminal será una 'bomba de tiempo'. Queremos que funcione pero en las condiciones adecuadas para atender las demandas de los usuarios", agregó Luis Velásquez.