Chávez anunció el martes que le detectaron una nueva "lesión" que tiene una alta probabilidad de ser maligna, en la misma zona del cuerpo de la que se le extrajo un tumor en junio del año pasado, y que se operará en los próximos días en Cuba.
Ocho meses después de la primera intervención y a falta de ocho meses para las elecciones presidenciales, Chávez desmintió taxativamente que tenga metástasis o que se esté muriendo.
El presidente venezolano no ha precisado el momento en que viajará a La Habana, aunque señaló que se preparará para el fin de semana y que luego de la intervención quirúrgica requerirá bajar el ritmo que venía aumentando en los últimos meses y "repensar" su agenda personal.
"Lamentablemente no me van a ver (...), no voy a poder seguir con el ritmo que venía in crescendo sobre todo desde diciembre (...), no voy a poder porque estoy obligado a atender esta nueva circunstancia, a repensar mi agenda personal y a cuidarme y a enfrentar lo que haya que enfrentar", señaló este martes en una llamada al canal estatal VTV.
Chávez llamó a sus seguidores a acelerar la batalla con vistas a la campaña para las presidenciales del 7 de octubre
Globovisión/EFE
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