WILLIAM PEÑA/TalCualDigital
En los últimos años, la escasa oferta de contenidos atractivos y las pocas opciones en señales abiertas de TV, han impulsado a los venezolanos a adquirir servicios de televisión paga para incrementar sus opciones de entretenimiento y, aunque en algunos casos, éstas terminan impactando sus ya golpeados bolsillos, la decisión también les brinda la posibilidad de dar a sus hijos un lugar de resguardo y diversión por los temas de inseguridad que azotan al país y de alto costo de la vida que padecen para llevarlos a divertirse fuera de casa. Y es que, como se sabe, ir al cine en Venezuela , por ejemplo, puede costar a una familia promedio lo que paga mensual por un servicio de TV estándar.
Es por ello que los servicios, a pesar de los grandes problemas que enfrentan los proveedores en equipos e infraestructura, entre otros, siguen creciendo. Así lo confirman los números de Conatel, el organismo regulador del sector, que destacan que, en un año, la adopción de servicios de TV por suscripción en el país creció poco más de 10 puntos porcentuales, para ubicarse en 57,91% de los hogares con acceso. Es decir que poco más de 4,2 millones de hogares disfrutan de los servicios hoy día, con un crecimiento de más 820 mil nuevos hogares que tomaron la decisión de disfrutar de una televisión más diversa, con más contenidos y canales en los últimos doce meses.
De ese número, las mayores audiencias están empezando a concentrarse en las zonas populares, donde, mediante la adquisición de los servicios satelitales, comienzan a disfrutar de la televisión paga, pues los servicios de cable siguen siendo imposibles para llegar hasta muchos de esos sectores.
Según cálculos extraoficiales, en Venezuela, poco más de 2,5 millones de hogares disfrutan de servicios de TV vía satélite, alcanzando un 60% del total de hogares conectados. Pero ese crecimiento exponencial es reciente (DirecTV, que ofrece TV satelital, siempre ha sido el líder del sector en el país), sobre todo a raíz de la decisión de empresas como Movistar, Inter y más tarde la estatal Cantv, de comenzar a ofrecer servicios satelitales a los clientes potenciales como consecuencia, por un lado, de una disminución de las opciones de expansión de servicios vía cable en el resto del país (Inter) por limitación de divisas para el despliegue de más infraestructura, entre otras y, por la otra, la decisión de Movistar y Cantv de ingresar a un negocio que apenas comenzaba a crecer y en el que había mucho que explotar.
Eso sí, las estrategias de penetración y captación de clientes de cada uno son diferentes. Mientras que la estatal Cantv afianza su modelo de servicios amparada en un esquema social con una oferta de unos 43 canales a un pago mensual bajo, estimado en unos 15 dólares o un poco más, las operadoras privadas duplican el monto del cobro mensual pero también duplican o hasta triplican el número de canales disponibles.
En Venezuela, desde hace poco más de un año, el Gobierno Nacional también lanzó en una primera fase el servicio de Televisión Digital Terrestre, denominada en el país como TDA, que es la migración natural de la TV abierta y gratuita a una TV digital de similares condiciones. En poco más de un año, según datos oficiales, han entregado más de 360 mil decodificadores a hogares de zonas populares bajo la coordinación de los Consejos Comunales, que son quienes designan a los beneficiados que no tienen opción de TV paga en casa. A la fecha esa oferta contiene poco más de 11 canales y sólo se puede acceder mediante un decodificador digital o adquiriendo un TV con sintonizador de la señal elegida por el país como su estándar de TV Digital, la ISDB-T.
Miranda, Zulia y Distrito Capital son las zonas que más suscriptores de servicios tienen en el país. Entre las tres, superan más del 30% de la penetración de todo el país.
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