Diosdado Cabello y Juan Barreto se han vuelto altos panas. El milagro ocurrió cuando Maduro expresó su deseo de oxigenar el Polo Patriótico y establecer contacto con las organizaciones que viven de los mendrugos del poder
Quienes los conocen dicen que no se podían ver. Pero de repente, Diosdado Cabello y Juan Barreto se han vuelto altos panas. El milagro ocurrió cuando Maduro expresó su deseo de oxigenar el Polo Patriótico y establecer contacto con las organizaciones que viven de los mendrugos del poder (PCV, Podemos, MEP, el grupo de la finada Lina Ron, etc). Entonces, ese avión que ocupa la presidencia de la AN le tomó la palabra y se propuso para entenderse con el exalcalde mayor y único dirigente de Redes.
A Juan Barreto, quien se marchitaba en el dogout esperando su turno al bate, le cayó como bendición que Diosdado lo tomara en cuenta. "Siempre hemos tenido una relación muy afectiva, muy amistosa, me siento buen amigo de él y esperamos que eso tenga un impacto en la política", respondió ipso facto Barreto al conocer la autodesignación de Cabello como puente entre Redes y el PSUV.
De Barreto, dicen en el PSUV, que el finado poseía un voluminoso expediente que nunca llegó a ventilar. Ahora, cuando Diosdado como Juan necesitan consolidar sus liderazgos ante un Maduro que los arropa. Deben actuar juntos antes de que Nicolás se convierta en un segundo Chávez.
Cort. TalCualDigital
No hay comentarios:
Publicar un comentario