SEBASTIÁN BOCCANEGRA/TalCualDigital
Marcela Máspero fue una de los millones de venezolanos que creyeron en la propuesta encabezada por el fallecido expresidente Hugo Chávez. También es una de los millones de personas que se han venido desencantando. Es coordinadora de la Unión Nacional de Trabajadores y buena conocedora de la realidad laboral del país.
Es por ello que no tiene dudas sobre el gobierno "obrero" que encabeza Nicolás Maduro. Ese cuento que propagan desde Miraflores se lo podrán meter a otros, pero no a Marcela.
Ella puede relatar varias experiencias donde los dirigentes de la "revolución" han utilizado a los trabajadores para ponerle la mano a algunas empresas, les han prometido respetar y mejorar todas las conquistas y derechos laborales, pero cuando se convierten en patrones son peores que el peor de los explotadores capitalistas.
No respetan nada, en muchos casos ni quieren firmar nuevos contratos colectivos, pero además de eso les abren juicio a los dirigentes sindicales que cumplen con su función de defender a sus representados.
Criminalizan la protesta y la disidencia. El último ejemplo de esto lo tenemos en Sidor. Lo peor es que los trabajadores y sus organizaciones se encuentran en una indefensión jurídica total, pues el Ministerio del Trabajo es cómplice de las decisiones represivas del gobierno y la Fiscalía General de la República también.
Esperar otra cosa de Luisa Ortega Díaz es mucha ingenuidad. Menos mal que Nicolás Maduro encabeza un gobierno de los trabajadores, cómo sería la cosa si no fuera así.
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