Según un estudio realizado por Kantar Worldpanel, el 52 por ciento de las mujeres –hoy en día- prefiere la suavidad del algodón en su ropa interior. Tan sólo el 25 por ciento de las féminas entrevistadas, indicaron que aún conservan alguna tanga entre los cajones de la ropa. Esto es, cinco por ciento menos que año anterior.
La investigación asegura que el sexo femenino la encuentra –a la tanga- "inestética y poco cómoda". La mayoría de las mujeres que opinaron, se inclina por unos cómodos bóxers femeninos. En contraste, el 54 por ciento de los caballeros sigue considerando que la tanga es altamente sexy, pero sólo el 3 por ciento de los varones las utiliza. De hecho, el 57 por ciento de los hombres utilizan bóxers también.
El evento realizado en la capital gala, congregó a más de 500 marcas de prendas íntimas. Durante este singular encuentro, su organizadora Cécile Vivier-Guerin, comentó que "la tanga ha tenido sus momentos de gloria en los años 90, durante el movimiento erótico-chic, pero esta tendencia ha cambiado con la vuelta al confort y el bienestar".
Las cifras ofrecidas en el Salón dejan ver un mundo menos "sexy" del que muchos imaginaban. Por ejemplo, cuatro de cada cinco mujeres nunca ha utilizado en su vida un liguero. De hecho, lo ven más como un disfraz que como una prenda que pueda utilizarse en la vida práctica.
La tendencia es entonces la comodidad, la suavidad, lo práctico, muy por encima de impacto que esto pueda tener en el sexo opuesto. "La Tanga en una prenda sexy, pero impráctica, incómoda y fuera de moda", remarca Vivier Guerin.
Sin embargo, hay quienes dicen que todo lo que se marcha, algún día regresa. ¿Será ese el caso de la Tanga? Quizá, pero por lo que se observa, habrá que esperar décadas. Y para muestra, hay que ver que este mismo Salón ha marcado el regreso del Corset. La prenda que moldeaba la figura de las abuelas, hoy está de vuelta. Quizá en el transcurso del siglo, la Tanga será revalorada.
Cort. E-consulta.com
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