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| Foto cortesía de: Edsau Olivares/El Universal |
En el papel, los Navegantes del Magallanes lucían como un equipo explosivo a la ofensiva y por momentos así lucieron en esta final; sin embargo, en el séptimo y último encuentro de esta etapa decisiva, la nave logró desplegar todo su potencial con el madero y bombardeó a Cardenales de Lara 11 carreras por 9, gracias a jonrones de Endy Chávez, Juan Rivera, Pablo Sandoval, Héctor Giménez y Carlos Maldonado, que les permitieron hacerse del título número 11 de su historia y primero desde la campaña 2001-2002.
Desde el mismo primer inning ambos conjuntos empezaron a golpearse, Luis Jiménez, por Lara, descargó jonrón de dos carreras, pero inmediatamente los Navegantes respondió de la misma manera. Chávez, al segundo pitcheo que vio, dio un largo elevado a la derecha que cayó en los graderíos de un José Bernardo Pérez que empezó casi repleto y que terminó viendo como 16.844 personas lo llenaron.
Sin embargo, allí no se detuvo el ataque de los dirigidos por Luis Sojo, quien pudo sacarse la espinita del título que perdió en la final de la temporada 2007-2008 de manos de los Tigres de Aragua, cuando éste dirigía a sus contrincantes de esta noche. En el segundo inning, Maldonado enganchó un envío de Raúl Rivero que depositó en los bleachers de la izquierda, en un batazo que remolcó tres carreras, pues encontró a Mario Lissón y a Ezequiel Carrera.
Un inning más tarde, Rivera descargó bambinazo productor de dos anotaciones y a este le siguió un doble de Eliézer Alfonzo que se convirtió en carrera, luego que César Izturis no pudiera manejar un batazo de Lissón que se internó en el centerfield. A esas alturas del juego, esta era la primera rayita que no era producida por batazos de largometrajes.
Ya en cuarto los crepusculares intentaron reaccionar y pusieron el marcador a razón de dos carreras, luego que Paulo Orlando sonara un sencillo que remolcó a Robert Pérez; a este indiscutible le siguió otro de Izturis, que impulsó a José Yépez, y después Yangervis Solarte coronó el rally con un doble que dejó la pizarra 7-5 a favor del Magallanes.
Sin embargo la respuesta de los filibusteros no se hizo esperar y en la parte baja de ese cuarto episodio, Elvis Andrus bateó indiscutibles por el jardín izquierdo, enseguida Pablo Sandoval la desapareció por la derecha para dos rayitas y luego Héctor Giménez largó el segundo jonrón en la entrada de la ofensiva turca.
En el cierre del quinto Ezequiel Carrera anotó la undécima carrera para los nautas gracias a un doble de Carlos Maldonado.
Los pájaros rojos descontaron en el sexto ante el relevista Fabio Castro, Cesar Izturis abrió con imparable por el leftfield, con un out en la pizarra, Luis Jiménez despachó su segundo batazo de cuatro esquinas en el juego para traer dos.
En el cierre del noveno Gustavo Chacín sacó la clase, pese a permitir par de carreras gracias a un cuadrangular de dos carreras del antesalista Oswaldo Navarro, no obstante se las arreglo para cerrar el encuentro con seis strikes consecutivos para dejar la pizarra final 11x9 a favor de los turcos.
Jean Machí (1-0) se acreditó la victoria al lanzar una entrada y dos tercios en blanco con tres ponches, mientras que Raul Rivero (1-1) cargó con la derrota al permitir cuatro carreras en apenas uno y un tercio de labor.
Al final del encuentro los medios de comunicación eligieron a Pablo Sandoval como el jugador más valioso de la final con 53 votos, “Fue muy importante para nosotros traer la serie de casa porque contamos con el apoyo del público, eso fue parte de esa motivación extra que nos permitió concretar dos victorias consecutivas”, expresó emocionado, mientras que su compañero Endy Chávez comentó, “Siempre confiaba en que podiamos ganar, estabamos todos unidos, mis compañeros me llaman el capi, asumo la responsabilidad, estoy pendiente de ellos y para mí es un orgullo estar con ellos y celebrar el título.
En tanto su colega Ezequiel Carrera dijo, “Hicimos todo los posible, estoy muy contento porque conseguimos el título, le dedicamos este triunfo a Carlos García, quien nos aopoyó todo el tiempo, sembró en nosotros ese amor por la camiseta.
Otro que fue pieza clave a lo largo de la ronda final fue Mario Lissón, “Siempre le dije al manager Luis Sojo que estaba listo para jugar donde el quiera y bueno cuando me dijo que me necesitaba en la segunda, así lo hice y en verdad me siento muy agradecido por esa confianza que me brindo a los largo de la temporada”.
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