La credibilidad de Venevisión sufrió un nuevo golpe el pasado domingo cuando anunció, repentinamente, que no transmitiría la entrega de los premios Oscar.
Lo que era una tradición de 39 años desapareció de golpe. La excusa oficial es que no habían comprado los derechos de transmisión, pero hay gente que asegura que en la preventa hecha por el canal de La Colina para este año 2014 estaba incluida la difusión del referido evento. En la planta del señor Cisneros parece haber mucho miedo. Prefieren hablar lo menos posible sobre la situación política del país.
Una muestra de ello ocurrió durante la reunión realizada en Miraflores, cuando el representante de los canales de TV privados y alto ejecutivo de Venevisión, Carlos Bardasano, apenas habló.
Se limitó a decir que sus representados estaban a la orden para lograr la paz en el país. Su intervención fue tan corta que sorprendió al propio Maduro, quien lo elogió por su brevedad.
En esta oportunidad el anuncio de Venevisión de que no transmitiría el Oscar se produjo apenas unas horas antes del inicio del evento y pocas horas después de que la ministra de Censura ¬oficialmente de Información- Delcy Rodríguez anunciara en su cuenta en Twitter que "extremistas de derecha hacen lobby en Hollywood en búsqueda de pronunciamientos contra Venezuela en la entrega de premios Oscar". En el pasado Venevisión se identificaba como el canal del Tigrito, evidentemente ese tigrito tiene culillo.
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