El régimen de Nicolás Maduro fracasó en su intento por torpedear la reunión de emergencia ante la Organización de Estados Americanos (OEA), convocada para discutir la crisis en Venezuela y el encuentro de cancilleres tendrá lugar en los próximos días, dijo el lunes una fuente cercana a la situación.
“Fracasaron. La delegación de Venezuela encabezada por (el embajador del país sudamericano ante la OEA, Roy) Chaderton ha quedado muy mal”, dijo la fuente que habló bajo condición de anonimato.
“La reunión será realizada tan pronto el estado del tiempo lo permita. En este momento el acceso a Washington está bloqueado por la nevada que está cayendo, pero tan pronto mejore el tiempo, tendremos la reunión”, agregó la fuente.
El encuentro, convocado la semana pasada por el presidente de Panamá, Ricardo Martinelli, había sido bloqueado por la delegación venezolana que pidió la nulidad de la solicitud, alegando que fue efectuada en ausencia del presidente del Consejo Permanente, el dominicano Pedro Vergés.
Al hacer uso del tecnicismo, Chaderton argumentó que la ausencia de Vergés deja la convocatoria en manos de la delegación que desempeña la vicepresidencia del Consejo Permanente, que actualmente es precisamente la delegación venezolana.
Los estados miembros de la OEA ocupan la presidencia y vicepresidencia de manera rotatoria durante periodos de tres meses.
Según la fuente, la práctica dilatoria de Venezuela buscaba darle a la delegación suficiente tiempo para ejercer presión sobre Panamá y forzarla a dejar de lado la solicitud, introducida en medio de perturbadores informes de violaciones a los derechos humanos cometidos por las fuerzas represivas del chavismo contra los manifestantes venezolanos.
Pero las presiones ejercidas por Chaderton sólo sirvieron para cimentar la resolución de la delegación panameña, dijo la fuente.
“Chaderton fue muy torpe. Y si existía alguna duda entre el personal de Panamá sobre la convocatoria, eso quedó de lado con la actitud tan descortés de Chaderton. Muchos de ellos se han molestado”, explicó.
La reunión estaba siendo preparada en momentos en que fuerzas del chavismo emprenden una violenta andanada represiva, en la que las fuerzas del orden han disparado contra manifestantes que exigen un fin al desabastecimiento de productos, la alta inflación y el auge delictivo.
Según datos oficiales, la represión ha dejado un saldo oficial de al menos 18 muertos y más de 250 heridos, al tiempo que cientos de personas han sido arrestadas, incluyendo el líder opositor Leopoldo López.
Pero organizaciones no gubernamentales han detectado además el uso de la tortura contra los manifestantes, quienes son sometidos a palizas durante sus cautiverios, y en ocasiones son sometidos a descargas eléctricas. En al menos un caso documentado, uno de los manifestantes fue violado con el cañón de un fusil.
Dirigentes de la oposición venezolana dijeron el lunes que esperan que en esta ocasión la OEA actúe para velar por los derechos de los venezolanos.
“Esperamos una reacción firme, decidida, tanto del secretario general como de los jefes de Estado de los países democráticos del continente en estas horas”, indicó a periodistas la diputada María Corina Machado, quien encabezó una marcha hasta la sede en Caracas de la organización multilateral.
“Si la OEA le da la espalda a Venezuela en estas horas no solamente estará traicionando a Venezuela, estarán enterrando a la OEA”, agregó.
El Nuevo Herald
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