SCZ/Globovisión/EFE
El grupo del Partido Socialista (PSOE) en el Senado, la Cámara Alta del Parlamento español, defendió hoy la política "pragmática, constructiva y crítica" del Gobierno de España respecto a Venezuela, con cuyo Ejecutivo mantendrá "una interlocución responsable y prudente". El Grupo Socialista en la Comisión de Asuntos Iberoamericanos del Senado respondió así en un comunicado al senador del opositor Partido Popular (PP) Dionisio García Carnero, quien presentó este martes varias iniciativas parlamentarias de apoyo a los españoles afectados por las expropiaciones a ciudadanos españoles en Venezuela.
El senador del PP criticó la "terquedad" del Gobierno español, al que reprocha que "no haga nada que pueda molestar a (el presidente de Venezuela) Hugo Chávez".
En el comunicado del PSOE, su portavoz en la Comisión de Asuntos Iberoamericanos del Senado, Emelina Fernández, subraya que España reconoce la legalidad democrática del Gobierno venezolano y apuesta por un diálogo "constante y constructivo" con el que "expresa su preocupación por determinadas acciones que pueden afectar a las libertades públicas".
Este diálogo constante y constructivo "nos permite hacer hincapié en la necesidad de preservar el Estado de derecho, la seguridad jurídica, la libertad de expresión, el respeto a las minorías y el clima de entendimiento social, así como salvaguardar los grandes intereses de la colectividad española radicada allá" y "los de nuestras empresas", subraya la senadora socialista.
En este sentido recalca que, "en el marco de este clima de diálogo, el Gobierno ha expresado a las autoridades venezolanas por diferentes vías su preocupación respecto de determinadas actitudes o medidas que podrían afectar a las libertades públicas cuando las circunstancias así lo han requerido".
Diego Arria denunció en una rueda de prensa en el Senado el "silencio" del Gobierno español ante las expropiaciones por parte de Venezuela de fincas rurales de españoles.
Arria pidió a España que modifique su postura política con Venezuela porque de no hacerlo "devaluará" su papel en Latinoamérica.
Según él, la inacción del Gobierno de España no ha devuelto las tierras a los 220 españoles residentes en Venezuela afectados por la ocupación de sus fincas.
En respuesta a la intervención de Arria en el Senado, la Embajada de Venezuela en España divulgó un comunicado en el que el embajador, Julián Rodríguez, afirma que "la derecha española, en su intento de recurrir a políticos caducos de la oposición venezolana, tiene como propósito entorpecer las relaciones con España, que cada vez son mejores y tienden a la excelencia".
El embajador asegura que a Venezuela no le preocupa la visita de Arria, "que para la mayoría de los venezolanos es un desconocido", pero sí "la actitud de algunos miembros del PP, que están haciendo todos los intentos por presionar al Gobierno del presidente Zapatero para enturbiar las relaciones bilaterales con Venezuela".
Los litigios vigentes por expropiaciones afectan a propietarios españoles e hispano-venezolanos, principalmente de origen gallego y canario, denunciantes de la invasión y ocupación de sus fincas agrícolas e industriales por parte del Estado venezolano.
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