Hace unos días The Jerusalem Post informó que en la última década se ha reducido a la mitad la comunidad judía venezolana. De unos 18.000 que vivían en el país en 1999, quedan unos 9.500.
Según informó a la prensa Salomón Cohen, presidente de la Confederación de Asociaciones Israelitas de Venezuela, entre las principales causas de este éxodo estarían: (1) una economía en declive; (2) la falta de seguridad y (3) anti-semitismo (fomentado desde la misma Presidencia de la República).
Sin embargo, The Jerusalem Post se quedó corto. El éxodo de los venezolanos no sólo es de los judíos. También lo es de centenas de miles de hijos, nietos y bisnietos de ciudadanos europeos, del Medio Oriente y de cubanos anti castristas que tanto contribuyeron con su esfuerzo y trabajo a la construcción de una Venezuela próspera y democrática.
Irónicamente, esta generación de venezolanos que hoy se va del país desciende de aquéllos que se fueron de sus países de origen por las mismas razones que hoy impulsan a sus descendientes a emigrar.
En su mayoría, los venezolanos que se van son jóvenes profesionales, técnicos, y gente productiva con mucho que dar para el progreso del país. Incluso familias enteras se han marchado por diferentes razones, todas ellas vinculadas al rechazo de un régimen retrógrado que no ofrece oportunidades de trabajo, de mejor calidad de vida ni de seguridad a sus ciudadanos.
En la página web de "mequieroir.com" se afirma que según "estudios recientes de opinión pública, más de 43% de la población general venezolana se marcharía si se le presentara la oportunidad de hacerlo, indicador que aumenta a 53% cuando se interroga a jóvenes menores de 24 años".
En 2003 se dio la primera oleada grande de pérdida de talentos, cuando salieron del país la mayoría de los más de 20.000 profesionales y técnicos expulsados de PDVSA por el propio presidente Chávez y por razones políticas. Ésta fue una pérdida de talento, conocimiento y experiencia que no se recuperará en años. Son profesionales que hoy contribuyen al desarrollo de las industrias petroleras y petroquímicas de Colombia, Canadá, Medio Oriente y Estados Unidos, entre otros.
La segunda ola de talentos que se fue del país se disparó cuando se comenzó a aplicar la Lista Tascón-Chávez con la cual viene sometiendo a un apartheid a los venezolanos que pidieron un referendo revocatorio del mandato de Hugo Chávez.
Luego se han venido produciendo olas consecutivas de éxodos. Unos por razones económicas, buscando mejores oportunidades de vida. Otros marginados profesionalmente. Muchos perseguidos por diversos motivos por un sistema de justicia que está al servicio del régimen de Chávez. Y los más, impulsados por la ingente violencia e inseguridad que cobra miles de vidas jóvenes cada día.
Venezuela, tristemente ha pasado a ser un país de emigrantes que se está castrando al quedar sin juventud promisoria para su futuro
Según informó a la prensa Salomón Cohen, presidente de la Confederación de Asociaciones Israelitas de Venezuela, entre las principales causas de este éxodo estarían: (1) una economía en declive; (2) la falta de seguridad y (3) anti-semitismo (fomentado desde la misma Presidencia de la República).
Sin embargo, The Jerusalem Post se quedó corto. El éxodo de los venezolanos no sólo es de los judíos. También lo es de centenas de miles de hijos, nietos y bisnietos de ciudadanos europeos, del Medio Oriente y de cubanos anti castristas que tanto contribuyeron con su esfuerzo y trabajo a la construcción de una Venezuela próspera y democrática.
Irónicamente, esta generación de venezolanos que hoy se va del país desciende de aquéllos que se fueron de sus países de origen por las mismas razones que hoy impulsan a sus descendientes a emigrar.
En su mayoría, los venezolanos que se van son jóvenes profesionales, técnicos, y gente productiva con mucho que dar para el progreso del país. Incluso familias enteras se han marchado por diferentes razones, todas ellas vinculadas al rechazo de un régimen retrógrado que no ofrece oportunidades de trabajo, de mejor calidad de vida ni de seguridad a sus ciudadanos.
En la página web de "mequieroir.com" se afirma que según "estudios recientes de opinión pública, más de 43% de la población general venezolana se marcharía si se le presentara la oportunidad de hacerlo, indicador que aumenta a 53% cuando se interroga a jóvenes menores de 24 años".
En 2003 se dio la primera oleada grande de pérdida de talentos, cuando salieron del país la mayoría de los más de 20.000 profesionales y técnicos expulsados de PDVSA por el propio presidente Chávez y por razones políticas. Ésta fue una pérdida de talento, conocimiento y experiencia que no se recuperará en años. Son profesionales que hoy contribuyen al desarrollo de las industrias petroleras y petroquímicas de Colombia, Canadá, Medio Oriente y Estados Unidos, entre otros.
La segunda ola de talentos que se fue del país se disparó cuando se comenzó a aplicar la Lista Tascón-Chávez con la cual viene sometiendo a un apartheid a los venezolanos que pidieron un referendo revocatorio del mandato de Hugo Chávez.
Luego se han venido produciendo olas consecutivas de éxodos. Unos por razones económicas, buscando mejores oportunidades de vida. Otros marginados profesionalmente. Muchos perseguidos por diversos motivos por un sistema de justicia que está al servicio del régimen de Chávez. Y los más, impulsados por la ingente violencia e inseguridad que cobra miles de vidas jóvenes cada día.
Venezuela, tristemente ha pasado a ser un país de emigrantes que se está castrando al quedar sin juventud promisoria para su futuro
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