COPIAPO, Chile (AFP) - Recrear las condiciones del día y la noche y la asignación de tareas son parte fundamental de la operación para mantener en buen estado a los 33 mineros chilenos atrapados a 700 metros de profundidad, según expertos y autoridades.
En paralelo avanzan los trabajos de perforación de la máquina Strata 950, que construirá el ducto por donde se prevé que emerjan a la superficie los mineros, pese a que durante la tarde del miércoles los trabajos se detuvieron momentáneamente al encontrarse una falla geológica, dijeron ingenieros a cargo.
Al cabo de unas horas, no obstante, el trabajo se reinició, alcanzando los 30 metros sobre un total de 700 metros de extensión que debe alcanzar el tubo hasta el lugar donde están atrapados los mineros.
La mayoría de ellos se ven repuestos físicamente, de buen ánimo, afeitados y limpios, según un reciente vídeo difundido por la televisión el martes.
Después de una primera etapa de hidratación, seguida de otra de ingesta de alimentos comprimidos, los mineros comenzaron a recibir lentamente comida sólida.
Este miércoles comieron sus primeros alimentos calientes, enviados a través de envases térmicos por el ducto que los comunica con la superficie. El grupo se mueve en un espacio de casi un kilómetro sin acceso a la luz solar.
El desafío ahora es mantenerlos en las mejores condiciones sicológicas posibles hasta que se pueda proceder a su rescate.
En este empeño, reproducir las condiciones del día y de la noche al interior de la mina -sin contacto con la luz solar, en un ambiente extremadamente caluroso y húmedo-- y trazarles objetivos a los mineros resultan tareas cruciales.
"Lo más importante que estamos haciendo en este momento desde el punto de vista sicológico es simular condiciones de día, de noche, separar el espacio donde residen en áreas", explicó el ministro de Salud Jaime Mañalich.
"Con la ayuda de la NASA vamos a poder simular adecuadamente la luz de día y luz de noche con luces artificiales. Ellos van a aportar equipamiento, mecanismos de energía, desarrollo de lámparas LED", señaló el ministro.
Asimismo, "tienen calculado exactamente cuál es la intensidad de la luz en cada parte de la mina que tenemos que tener para este propósito", agregó.
Los cuatro expertos de la NASA que este miércoles se trasladaron hasta la mina San José se mostraron "impresionados con la organización del equipo de rescate, y con el coraje de los mineros y la organización que ellos mismos implementaron en circunstancias muy difíciles", según el subjefe médico de la NASA, James Duncan.
Los expertos de la NASA -agregó Mañalich- recomendaron además ser honestos con los mineros pero no mencionarles plazos fijos para su rescate, además de lograr captar su atención en un objetivo. Los mineros, no obstante, tienen relativamente claro que el rescate tardará al menos tres meses.
"Se les ha dicho que estamos hablando que esto (el rescate) ocurriría en los últimos días de noviembre y primeras semanas de diciembre, y que todos deseamos que estén con nosotros para la Navidad. Y creo que a ellos no los pilló en absoluto de sorpresa", puntualizó Mañalich.
La jornada de los mineros se inicia a las 7H30 de la mañana, con un desayuno compuesto de sándwich y un yogurt o leche. Luego tienen un espacio para asearse, y después toman contacto telefónico con la superficie para el control médico o el reporte que hace el jefe de turno, Luis Urzúa.
Después de almorzar, realizan una oración comunitaria y dedican un espacio para leer las cartas que les envían sus familiares y responderlas.
La cena está programada para las 20H00 locales, y se van a dormir entre 22H00 y 23H00, en las camas de campaña que se les envió, según las autoridades.
Paralelamente, los dueños del yacimiento San José citaron este miércoles a una junta de acreedores para evaluar una declaración de quiebra debido a su mala situación financiera.
En el documento, ingresado a la Corte de Apelaciones de Santiago, se convoca a una junta de acreedores que deberá designar un "experto facilitador" para revisar los antecedentes de la compañía y determinar la viabilidad de ésta o en caso contrario solicitar la quiebra.
En tanto, donantes anónimos han consignado más de 70.000 dólares en una cuenta corriente denominada "3333, Chile por los mineros", que tiene por objetivo apoyar económicamente a los trabajadores.
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