Los rapaces han sorprendido a propios y extraños con su zafra | Ángel Obertein
Las Águilas llegan de primeros al ecuador de la campaña y sus figuras mandaron
Octavio Hernández Pernia/Líder en Deportes
CARACAS.- Las Águilas del Zulia durante la primera mitad de la presente campaña han rondado los cielos de la Liga Venezolana de Beisbol Profesional viendo a los diamantes del circuito y a sus respectivos rivales siempre hacia abajo.
Volando con los brazos más efectivos de la presente campaña, los dirigidos por Jody Davis consiguieron acumular once victorias consecutivas, imponiendo un nuevo récord para la franquicia.
Sus abridores, específicamente, han sentado las bases fundacionales de la foja que actualmente ostentan (19-10) liderando la LVBP en EFE con 2.10 y en ponches con 108.
De hecho, tres de los cuatro primeros lanzadores en efectividad de la LVBP pertenecían ayer al dugout de los rapaces (Álex Torres, Josh Schmitd y Austin Bibens-Dirkx)
“Este inicio ha sido muy divertido para mí y para los muchachos. Cuando ganas tantos juegos en fila los jugadores se relajan”, confesó la semana pasada el mánager de los aguiluchos, Jody Davis, que, en contra de todos los pronósticos, ha desbancado a los Navegantes del Magallanes y a los Leones del Caracas de la cima de la pelota local.
Junto a estos dictadores, revelaciones como Marcos Tábata, Jean Carlo Granados y Amalio Díaz como cerrador han logrado estabilizar el bullpen que en conjunto muestra una aceptable efectividad de 3.60.
En la parte ofensiva, Darin Mastroianni, Henry Rodríguez y el MVP de la zafra pasada, Ernesto Mejía, han logrado guiar una toletería que ha producido lo suficiente como para vivir de la renta de su pitcheo.
Debacle guairista
Hablar de la primera mitad de esta campaña sin mencionar a los Tiburones de La Guaira es obviar la crisis más pronunciada de equipo alguno en el año.
Los litoralenses iniciaron el año con cinco victorias en los primeros 16 juegos y luego del despido de Carlos Subero como mánager siguieron a Phil Regan hacia el más oscuro de los abismos, ganando solo un encuentro de los próximos 11.
Su total de derrotas (21 hasta ayer), a falta de la segunda mitad de campaña, pone a los ahora dirigidos por Marco Davalillo a tiro de un milagro para clasificar.
Octavio Hernández Pernia/Líder en Deportes
CARACAS.- Las Águilas del Zulia durante la primera mitad de la presente campaña han rondado los cielos de la Liga Venezolana de Beisbol Profesional viendo a los diamantes del circuito y a sus respectivos rivales siempre hacia abajo.
Volando con los brazos más efectivos de la presente campaña, los dirigidos por Jody Davis consiguieron acumular once victorias consecutivas, imponiendo un nuevo récord para la franquicia.
Sus abridores, específicamente, han sentado las bases fundacionales de la foja que actualmente ostentan (19-10) liderando la LVBP en EFE con 2.10 y en ponches con 108.
De hecho, tres de los cuatro primeros lanzadores en efectividad de la LVBP pertenecían ayer al dugout de los rapaces (Álex Torres, Josh Schmitd y Austin Bibens-Dirkx)
“Este inicio ha sido muy divertido para mí y para los muchachos. Cuando ganas tantos juegos en fila los jugadores se relajan”, confesó la semana pasada el mánager de los aguiluchos, Jody Davis, que, en contra de todos los pronósticos, ha desbancado a los Navegantes del Magallanes y a los Leones del Caracas de la cima de la pelota local.
Junto a estos dictadores, revelaciones como Marcos Tábata, Jean Carlo Granados y Amalio Díaz como cerrador han logrado estabilizar el bullpen que en conjunto muestra una aceptable efectividad de 3.60.
En la parte ofensiva, Darin Mastroianni, Henry Rodríguez y el MVP de la zafra pasada, Ernesto Mejía, han logrado guiar una toletería que ha producido lo suficiente como para vivir de la renta de su pitcheo.
Debacle guairista
Hablar de la primera mitad de esta campaña sin mencionar a los Tiburones de La Guaira es obviar la crisis más pronunciada de equipo alguno en el año.
Los litoralenses iniciaron el año con cinco victorias en los primeros 16 juegos y luego del despido de Carlos Subero como mánager siguieron a Phil Regan hacia el más oscuro de los abismos, ganando solo un encuentro de los próximos 11.
Su total de derrotas (21 hasta ayer), a falta de la segunda mitad de campaña, pone a los ahora dirigidos por Marco Davalillo a tiro de un milagro para clasificar.
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