Familiares de Hernández vieron su cadáver en Catia. Venancio Alcázares
TOMÁS RAMÍREZ GONZÁLEZ | EL UNIVERSAL
Dos personas murieron y una resultó gravemente en dos hechos diferentes sucedidos luego del concierto "De la Juventud por la Vida y la Paz" organizado por el gobierno nacional para la conmemoración del 13 de Abril de 2002.
El primer crimen ocurrió cuando Julio Díaz (27) llevó a su primo Igner López (30) a su apartamento ubicado en la parroquia San Juan tras haber disfrutado de la presentación de las bandas de reggae Cultura Profética y Gondwana.
Llegaron a la avenida San Martín, entre las esquinas de Pepe Alemán y Cochera, a bordo de una camioneta Land Wing dorada. Justo debajo del edificio Beatriz cuatro sujetos se bajaron de un vehículo Chevrolet modelo Blazer luego de bloquear a las víctimas. De acuerdo con testigos que no quisieron ser identificados, pero que testificaron en la subdelegación del Cicpc de El Paraíso, los antisociales dispararon en doce oportunidades contra la camioneta.
"Una de las balas chocó contra el mataburros (parachoques) de la camioneta e hirió a uno de los bandidos. Por eso se fueron del lugar", expresó Ingrid González, esposa de Díaz, tras indicar que los heridos fueron llevados al hospital Miguel Pérez Carreño.
Tres balas atravesaron el pulmón, el hígado y el riñón de López, quien se encuentra en delicado estado de salud en el referido centro asistencial. Díaz murió antes de llegar tras haber sido herido de bala en ocho oportunidades.
Julio era consultor de sistemas en la compañía de televisión por suscripción DirecTV y estudiaba ingeniería en la universidad Simón Rodríguez. Igner estudia administración en el Politécnico Santiago Mariño y labora en el banco Mercantil.
La otra persona que fue asesinada tras asistir al evento fue José Gregorio Gudiño, de 23 años de edad, quien llegaba a su vivienda a las dos de la mañana de ayer en compañía de un amigo.
Gudiño estaba abriendo la puerta de su hogar, ubicada en la calle El Amparo de Catia, cuando se encontró que unos sujetos tenían una fiesta a dos casas.
De acuerdo con el relato de la madre del muchacho, Adela Montilla, un antisocial que estaba participando de la fiesta lo increpó y le disparó en el pecho en cinco oportunidades. Murió en el sitio.
El joven estaba estudiando último semestre del TSU en Petróleo en el Instituto Nuevas Profesiones.
Apuñalado por 500 bolívares
El miércoles santo, Osmer Rivas fue herido con un arma cortopunzante a las 10:20 de la noche en la Plaza Miranda de El Silencio. Murió ayer en el hospital Pérez Carreño. Su padre Onel indicó que había cobrado 500 bolívares ese día y lo agredieron para robarlo. Tenía dos meses en la ciudad desde que vino de Cumaná a probar suerte. Trabajaba en un depósito.
En otro caso, Robinson Uribe Hernández, de 28 años, también fue asesinado con un arma blanca en la entrada del barrio Corazón de Jesús en la avenida Sucre a las siete de la mañana de ayer.
Dos personas murieron y una resultó gravemente en dos hechos diferentes sucedidos luego del concierto "De la Juventud por la Vida y la Paz" organizado por el gobierno nacional para la conmemoración del 13 de Abril de 2002.
El primer crimen ocurrió cuando Julio Díaz (27) llevó a su primo Igner López (30) a su apartamento ubicado en la parroquia San Juan tras haber disfrutado de la presentación de las bandas de reggae Cultura Profética y Gondwana.
Llegaron a la avenida San Martín, entre las esquinas de Pepe Alemán y Cochera, a bordo de una camioneta Land Wing dorada. Justo debajo del edificio Beatriz cuatro sujetos se bajaron de un vehículo Chevrolet modelo Blazer luego de bloquear a las víctimas. De acuerdo con testigos que no quisieron ser identificados, pero que testificaron en la subdelegación del Cicpc de El Paraíso, los antisociales dispararon en doce oportunidades contra la camioneta.
"Una de las balas chocó contra el mataburros (parachoques) de la camioneta e hirió a uno de los bandidos. Por eso se fueron del lugar", expresó Ingrid González, esposa de Díaz, tras indicar que los heridos fueron llevados al hospital Miguel Pérez Carreño.
Tres balas atravesaron el pulmón, el hígado y el riñón de López, quien se encuentra en delicado estado de salud en el referido centro asistencial. Díaz murió antes de llegar tras haber sido herido de bala en ocho oportunidades.
Julio era consultor de sistemas en la compañía de televisión por suscripción DirecTV y estudiaba ingeniería en la universidad Simón Rodríguez. Igner estudia administración en el Politécnico Santiago Mariño y labora en el banco Mercantil.
La otra persona que fue asesinada tras asistir al evento fue José Gregorio Gudiño, de 23 años de edad, quien llegaba a su vivienda a las dos de la mañana de ayer en compañía de un amigo.
Gudiño estaba abriendo la puerta de su hogar, ubicada en la calle El Amparo de Catia, cuando se encontró que unos sujetos tenían una fiesta a dos casas.
De acuerdo con el relato de la madre del muchacho, Adela Montilla, un antisocial que estaba participando de la fiesta lo increpó y le disparó en el pecho en cinco oportunidades. Murió en el sitio.
El joven estaba estudiando último semestre del TSU en Petróleo en el Instituto Nuevas Profesiones.
Apuñalado por 500 bolívares
El miércoles santo, Osmer Rivas fue herido con un arma cortopunzante a las 10:20 de la noche en la Plaza Miranda de El Silencio. Murió ayer en el hospital Pérez Carreño. Su padre Onel indicó que había cobrado 500 bolívares ese día y lo agredieron para robarlo. Tenía dos meses en la ciudad desde que vino de Cumaná a probar suerte. Trabajaba en un depósito.
En otro caso, Robinson Uribe Hernández, de 28 años, también fue asesinado con un arma blanca en la entrada del barrio Corazón de Jesús en la avenida Sucre a las siete de la mañana de ayer.
No hay comentarios:
Publicar un comentario