Para resolver ese problema –y seguir bajo las normas de la ley islámica, Sharia—, el gobierno saudí construye una ciudad dedicada sólo a las mujeres en los alrededores de Hofuf, en el este del país arábigo, reportó CNN.
El objetivo es que la ciudad se convierta en un centro industrial en el que las mujeres puedan trabajar y unirse a la fuerza laboral sin tener contacto con hombres.
La nueva ciudad concentrará 5.000 empleos en el área de farmacéutica, textiles y procesamiento de alimentos y otros negocios, que incluye la posibilidad de que se unan mujeres emprendedoras.
El nuevo centro laboral “de ambiente femenino” costará 130 millones de dólares y, de acuerdo con las autoridades, se pretende replicar en otras ciudades.
Arabia Saudita ha sido severamente criticada por no admitir mujeres en la fuerza laboral y por limitar varias de sus actividades, como conducir un auto o siempre estar acompañadas por un hombre al salir a la calle.
Actualmente, solo el 15% de la fuerza laboral está constituido por mujeres y el 95% de ellas trabaja para el gobierno.
La creación de un espacio de trabajo para las mujeres coincide con una ola de cambios a favor de la mujer saudí. El año pasado, el rey Abdullah anunció que las mujeres podrán votar y ser votadas, además de que podrán tener una participación activa en el consejo de Shura, el Consejo Consultivo designado por el rey.
“La voz de la mujer se escuchará, finalmente”, dijo en esa ocasión. “Ahora es tiempo de quitar otras barreras como no permitirles manejar automóviles y tener una vida normal sin un guardián masculino”.
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