Al principio del gobierno del comandante "eterno" las masas que lo seguían se movilizaban a sus llamados sin recibir nada a cambio. A medida que fue transcurriendo el tiempo y reduciéndose el amor, los que manifestaban recibían algún emolumento que les alimentara las ganas.
Siempre todos sabían que su actividad tenía una motivación política. Podía ser para enfrentar una amenaza de invasión imperial, uno de los miles de intentos de magnicidio denunciados o simplemente para apoyar electoralmente al prócer de Sabaneta. Ahora que el chavismo murió su sustituto mueve a las masas pero bajo engaño.
La semana pasada gente de diversas parroquias de Caracas fue movilizada al centro de la capital con la excusa de que recibirían la tarjeta del Buen Vivir. Cuando llegaron al sitio acordado se encontraron con una tarima donde se realizaría el acto de apoyo a los candidatos del PSUV a las diferentes alcaldías de Caracas. La calentera que agarraron muchos fue muy grande y la fe en el proceso se resintió un poco más.
TalCualDigital
No hay comentarios:
Publicar un comentario