El derecho a la libertad de expresión es uno de los avances mejor consagrados y más significativos en tiempos de revolución, aunque también sea de lo más vilipendiado por la actual sociedad burguesa venezolana.
La transición hacia el socialismo ha abierto brechas nunca pensadas hacia un autentico derecho de expresar las ideas políticas que en las mentalidades oscuras que reinaron durante la Cuarta República y en sus herederas en la Quinta solo causa ceguera y rabia. Es sumamente común y hasta es parte del paisaje las constantes denuncias de la derecha sobre una supuesta violación a su derecho a la libertad de expresión así como, de persecución a causa de las ideas políticas, en pocas palabras acusan a la Revolución de prácticas que ellos solían hacer cuando eran gobierno. Refutarlos en dicho discurso siempre ha sido fácil y entre tesis y antítesis el teatro de operaciones mediático (Tal como bien nos dice Walter) ha sido testigo de batallas épicas entre el viejo modelo que no termina de morir y el nuevo que no termina de nacer pero siempre la Revolución se ha hecho cauce y ha continuado a pesar de no ser mayoría en el espectro radioeléctrico, o la prensa.
No existen ya “televidentes” sino “usuarios y usuarias” plenos de madurez política y conciencia histórica como para que un medio pueda imponer un hecho que no sea pasado por el filtro de la crítica. En las calles de toda Venezuela hay una nación, o mejor dicho otra nación candente, activa, viva y pensante; hemos aprendido (en buena medida gracias al Comandante Chávez) poco a poco a entender que la autocritica es la mejor herramienta y además la usamos aunque a veces sea reprimida como en el caso que hoy me mueve a escribir estas líneas.
El compañero Alberto Nolia quien nadie puede tildar de contrarrevolucionario ha sido sacado del aire en su espacio nocturno Los Papeles de Mandinga, la razón: ser autocritico, decir la verdad y ejercer su libérrimo derecho de libertad de expresión, pero al parecer algunos tienen más libertad de expresión que otros o ciertos temas son mejor no expresarlos en un programa que es de opinión. La interesante argumentación que hizo en su programa en días pasados sobre el uso y tenencia de armas, la ley de desarme y la posición del Comandante Chávez sobre armar al pueblo al parecer chocó de frente con alguna mentalidad medieval que toma la opinión de Alberto Nolia como la causa de la caída de la Revolución y demás argumentos sacados del “Malleus Maleficarum.” Nolia es tan libre de decir en su programa lo que piensa como lo soy yo de escribir este artículo, el problema es que la autocritica en público duele como una traición y como tal se trata. Si el Comandante Chávez no dijo que había que armar al pueblo es fácil de demostrar, acaso ¿no hacemos alharacas y programas especiales y “contactos con la realidad” por estupideces que dice la derecha? Con ubicar un solo video donde Chávez diga lo contrario basta, no hay que castigar al valeroso Nolia que extrajo un segmento de un video donde el Comandante cita a Fidel Castro sobre que si los obreros y estudiantes hubiesen tenido un fusil, no tumban a Allende.
Pero ¿por qué digo que no había que castigar a Nolia? Porque también dijo que hay guardias nacionales que le quitan las armas a la gente y las venden en las cárceles, y porque dijo que hay corruptos en la guardia nacional. Acaso ¿es mentira? Si es mentira que el Comandante General de la Guardia Nacional lo diga ante el país y si no que acepte la autocritica y promueva un verdadero proceso de depuración porque bastante que hace falta. La carencia de autocritica no es nueva, eso de “irreverencia en la discusión, lealtad en la acción” es un peligroso sofisma unidireccional que solo aplica a los más pendejos.
VTV se ha convertido en una suerte de vitrina propagandística que vulnera el derecho a la información con un absurdo sistema de priorización de lo que ellos consideran es noticia pero que dista de serlo. VTV prefirió transmitir en vivo la rueda de prensa de Diosdado Cabello a la llegada de Ruben Limardo a Angostura para donar la espada de Simón Bolívar porque parece ser que todos los días nos llega un medallista olímpico y eso no es noticia, son los mismos que con “un pase a prensa” mutilan la buena programación donde se informa en programas como Dando y Dando o Cayendo y Corriendo, son los que sacan del aire a sus mejores programas sin dar ninguna explicación y si lo hacen es a través de un twit peregrino. ¿Qué canal se da el lujo de desprenderse de sus programas con mayor rating a nivel nacional? VTV lo hace por razones ridículamente absurdas y actuando peor que la derecha. VTV no promueve la autocritica, nos tenemos que contentar con programas sosos donde todos giran alrededor de una única idea como en “Debate Socialista” donde todos socializan pero nadie debate o “Mesa Informativa” donde sus conductores compensan su falta de preparación sobre un tema con su opinión o en el peor de los casos con un lugar común.
Sirvan estas líneas para que entendamos que decirnos las cosas a la cara no nos matará y si algún ministro se molesta que se ponga a trabajar y ocupe su mente y manos en lo que realmente debe hacer que es la Revolución.
Por último quiero enviar un saludo fraternal al camarada Nolia, Mario Silva, Vladimir Acosta y a todos aquellos que son la voz de los que no tienen voz y que en mayor o menor medida reciben la mayoría del plomo que en otra circunstancias, la llevaríamos nosotros.
Hagamos la Revolución para que Chávez viva!
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