Según el informe reseñado por la agencia DPA, basado en datos suministrados por las empresas afectadas, los retrasos en los pagos llegan en algunos casos a cuatro meses, y afectan principalmente al sector de alimentos, que aumentó sus ventas a Venezuela en el marco del plan del gobierno brasileño de ayudar el país vecino a hacer frente a la escasez de bienes básicos.
El diario atribuye las demoras en pagos a la crisis económica en Venezuela, que ha hecho aumentar los controles sobre salidas de dólares por parte del gobierno de Nicolás Maduro.
Ante la preocupación de los empresarios afectados, Rousseff envió hace una semana a Venezuela a su ministro de Desarrollo, Industria y Comercio Exterior, Fernando Pimentel, y a su asesor para Asuntos Internacionales, Marco Aurelio García.
"Oficialmente, la misión tuvo por objetivo reforzar la disposición brasileña de ayudar al socio comercial a superar su crisis de abastecimiento, pero los pagos retrasados han sido uno de los temas principales", aseguró el reportaje.
Cort. El Universal
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