Traidor es el calificativo más empleado por quienes están en contra con lo escrito por Jorge Giodarni en su carta de despedida, luego de que Nicolás Maduro lo renunciara del cargo de ministro de Planificación
SEBASTIÁN BOCCANEGRA/TALCUALDIGITAL
Traidor es el calificativo más empleado por quienes están en contra con lo escrito por Jorge Giodarni en su carta de despedida, luego de que Nicolás Maduro lo renunciara del cargo de ministro de Planificación. Hubo gente que dudó de que dicha carta fuera cierta, por la rapidez con que fue publicada. Hay quienes dicen que lo único de todo lo planificado por el llamado monje que se cumplió fue la publicación de la referida carta.
Pero volviendo al calificativo desde el autonombrado alto mando político de la revolución ninguno de sus integrantes ha calificado con esa palabra a Giordani, aunque todos ellos han hecho reiterados y enérgicos llamados a la lealtad, cuando se han referido al tema. Es realmente lo único que han dicho, pues al fondo del asunto lo han pasado por bolas. Ni una palabra.
Ningún argumento. En cambio, en Aporrea el ex ministro cuenta con apoyos y también con detractores. Allí a los que no les cayó bien la carta no tienen pelos en la lengua y se despachan al susodicho con claridad: traidor y punto.
Tampoco debaten lo que dice la carta, simplemente cierran filas con los líderes y punto. Pero también hay los que creen en lo dicho por el despedido. Quienes insisten en que se investigue cómo se robaron más de 20 mil millones dólares a través de Cadivi, quienes creen que en la lucha contra la corrupción la "revolución" tiene una deuda que solo crece. Incluso hay quienes aseguran que la robadera es algo normal y corriente en la administración chavomadurista.
Dentro de este grupo hay unos camaradas a los que solo podemos llamar ingenuos, pues plantean que el contenido de la carta sea debatido en el congreso del PSUV a realizarse el próximo mes. Ese encuentro tiene toda su agenda bien definida. Allí los factores de poder van a dejar las cosas como están y dudamos mucho que los delegados que participen tengan la fuerza o la intención de plantear dicho tema. La alta dirigencia de la revolución va a hacer con dicha carta lo mismo que hacen con la Constitución: limpiarse el que te conté.
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