Por CARLOS OSORIO/AFP/BOGOTA
La capital colombiana estaba el jueves en alerta ante la llegada de unos 14 jefes de Estado para la toma de posesión el sábado del nuevo presidente Juan Manuel Santos, con la memoria aún viva de los atentados que empañaron la asunción de Alvaro Uribe, en el 2002.
El dispositivo de seguridad que comenzó a ser desplegado el jueves y del cual forman parte al menos 27,000 hombres de la Policía y del Ejército, incluye controles de seguridad en los accesos principales de la ciudad y registros de vehículos por militares fuertemente armados, constató la AFP.
El operativo también contempla sobrevuelos de helicópteros y aeronaves y busca contrarrestar acciones de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), que hace ocho años disparó proyectiles caseros contra varios sitios de Bogotá, incluso la sede presidencial, en momentos en que Uribe asumía el cargo.
Uno de esos disparos causó la muerte a 19 indigentes que se encontraban en las cercanías a la Presidencia.
"Aunque sabemos que las FARC están bastante afectadas en su logística y capacidad, no descartamos que concentre esfuerzos para tratar de hacer algún daño a través de sus milicianos, como estrategia para significar que sigue presente'', afirmó una fuente de inteligencia del Ejército.
El pasado 30 de junio las autoridades aseguraron haber frustrado un presunto plan de las FARC para realizar un atentado terrorista similar al del 7 de agosto del 2002.
De acuerdo con la directora del Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) de la Fiscalía, Marilú Méndez, miembros de ese organismo encontraron en una vivienda del sur de Bogotá dos morteros artesanales, planos de la Casa de Nariño (sede presidencial) y de otros sitios aledaños.
En el sitio fueron capturados dos presuntos integrantes de las FARC.
Según el director de Seguridad Ciudadana de la policía, 22,000 miembros de esa institución han sido dispuestos para garantizar la normalidad en Bogotá. A ellos se suman 4,000 integrantes de las Fuerzas Militares y 800 agentes del servicio de inteligencia (DAS).
Desde el pasado miércoles y hasta el 11 de agosto está prohibido portar armas, aún con salvoconducto, en la capital colombiana. También se restringirá, entre el viernes y el domingo, la circulación de motociclistas con acompañantes.
Santos, quien se desempeñó como ministro de Defensa de Uribe entre el 2006 y el 2009, y propinó los más duros golpes a las FARC en sus 46 años de historia, tomará posesión de su cargo en una ceremonia que tendrá lugar el sábado a partir de las 3:00 p.m. (hora local) en la céntrica Plaza de Bolívar.
El canciller Jaime Bermúdez señaló este jueves que a los actos de toma del poder concurrirán al menos 14 jefes de Estado, además de otras delegaciones oficiales de varios países del mundo.
Entre los mandatarios que llegarán al país se encuentran Felipe Calderón (México), Luiz Inácio Lula Da Silva (Brasil), Rafael Correa (Ecuador), Laura Chinchilla (Costa Rica), Sebastián Piñera (Chile) y Mijail Saakashvili (Georgia).
El dispositivo de seguridad que comenzó a ser desplegado el jueves y del cual forman parte al menos 27,000 hombres de la Policía y del Ejército, incluye controles de seguridad en los accesos principales de la ciudad y registros de vehículos por militares fuertemente armados, constató la AFP.
El operativo también contempla sobrevuelos de helicópteros y aeronaves y busca contrarrestar acciones de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), que hace ocho años disparó proyectiles caseros contra varios sitios de Bogotá, incluso la sede presidencial, en momentos en que Uribe asumía el cargo.
Uno de esos disparos causó la muerte a 19 indigentes que se encontraban en las cercanías a la Presidencia.
"Aunque sabemos que las FARC están bastante afectadas en su logística y capacidad, no descartamos que concentre esfuerzos para tratar de hacer algún daño a través de sus milicianos, como estrategia para significar que sigue presente'', afirmó una fuente de inteligencia del Ejército.
El pasado 30 de junio las autoridades aseguraron haber frustrado un presunto plan de las FARC para realizar un atentado terrorista similar al del 7 de agosto del 2002.
De acuerdo con la directora del Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) de la Fiscalía, Marilú Méndez, miembros de ese organismo encontraron en una vivienda del sur de Bogotá dos morteros artesanales, planos de la Casa de Nariño (sede presidencial) y de otros sitios aledaños.
En el sitio fueron capturados dos presuntos integrantes de las FARC.
Según el director de Seguridad Ciudadana de la policía, 22,000 miembros de esa institución han sido dispuestos para garantizar la normalidad en Bogotá. A ellos se suman 4,000 integrantes de las Fuerzas Militares y 800 agentes del servicio de inteligencia (DAS).
Desde el pasado miércoles y hasta el 11 de agosto está prohibido portar armas, aún con salvoconducto, en la capital colombiana. También se restringirá, entre el viernes y el domingo, la circulación de motociclistas con acompañantes.
Santos, quien se desempeñó como ministro de Defensa de Uribe entre el 2006 y el 2009, y propinó los más duros golpes a las FARC en sus 46 años de historia, tomará posesión de su cargo en una ceremonia que tendrá lugar el sábado a partir de las 3:00 p.m. (hora local) en la céntrica Plaza de Bolívar.
El canciller Jaime Bermúdez señaló este jueves que a los actos de toma del poder concurrirán al menos 14 jefes de Estado, además de otras delegaciones oficiales de varios países del mundo.
Entre los mandatarios que llegarán al país se encuentran Felipe Calderón (México), Luiz Inácio Lula Da Silva (Brasil), Rafael Correa (Ecuador), Laura Chinchilla (Costa Rica), Sebastián Piñera (Chile) y Mijail Saakashvili (Georgia).
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