martes, 10 de agosto de 2010

No hay pasta, la congestión en Puerto Cabello mantiene represado al Trigo.

 La congestión en Puerto Cabello mantiene represado al Trigo. Los fabricantes han tenido que pedirlo prestado para mantener abastecido el mercado Cadivi no reconoce los costos extras originados por la tardanza en el descargo de la mercancía  
Por: Luisa Benavides/TalCualDigital
El 16 de julio de este año llegó a la bahía de Puerto Cabello uno de los barcos proveedores de trigo a Pastas Sindoni y el 23 del mismo mes llegaron los buques que abastecen a Pastas Capri.
Más de dos semanas después de estos arribos, los barcos aún siguen fondeados esperando para descargar mientras los pastificios resisten la disminución alarmante de sus inventarios de materia prima.
El caso de Pastas Sindoni y Capri es sólo un ejemplo de la situación que están padeciendo todas las empresas fabricantes de pastas en el país.
Los industriales se encuentran a la espera de que se solucione la congestión de Puerto Cabello para reactivar algunos molinos que han tenido que ser paralizados por falta del trigo durum (materia prima de la pasta).
Simón Nobile, presidente de Pastas Capri y titular de la Asociación Venezolana de Fabricantes de Pastas Alimenticias (Avepastas), informó que dos molinos de Capri tuvieron que ser paralizados la semana pasada por falta de materia prima para operar.
La empresa ha tenido que pedir en préstamo 7 mil toneladas de trigo (que representa mes y medio de inventario) a otros industriales del sector para poder mantenerse operativos y seguir surtiendo al mercado.
"El problema que se está presentando en Puerto Cabello no se refleja en el mercado porque los pastificios se están ayudando entre sí para que los consumidores no se vean perjudicados", señaló Nobile.
El presidente de Capri indicó que prácticamente la mitad del pedido de trigo de la empresa que aún se encuentra en puerto será destinado, cuando finalmente sea despachado, para saldar el préstamo que mantiene con sus colegas, por lo que el inventario seguirá manteniéndose a medias.
COSTOS SE DISPARAN
El presidente de Avepastas alertó que otro problema que enfrentan los industriales es el cargo adicional que se origina cuando el barco no descarga en la fecha pautada. "Los buques cobran entre 20 y 30 mil dólares por cada día que permanecen fondeados sin poder desembarcar. Esta mora no es reconocida por Cadivi por lo que no puede ser cancelada al tipo de cambio oficial", precisó Nobile.
El tiempo promedio de descarga se maneja entre una semana o menos, pero debido a que la infraestructura portuaria venezolana no se da abasto por el volumen de importaciones, ahora la descarga requiere cuatro semanas y hasta a veces más.
El directivo también mencionó los gastos extras que se originan cuando tienen que transportar el trigo prestado desde otras empresas: "es un proceso complejo que también origina costos", señaló.
 

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