Cuatro personas continúan hospitalizadas, de las cuales dos han sufrido amputaciones y otra presenta fractura expuesta de la tibia y el peroné, explicaron a Efe fuentes de la Dirección de Seguridad Pública de Puerto Vallarta, en el estado de Jalisco.
Los hechos se produjeron en la medianoche en el bar "Pink Cheladas", donde se divertían alrededor de 150 jóvenes, de ahí que la edad de la mayoría de los lesionados se sitúe en torno a los 20 años, aunque uno de ellos tiene 35, indicaron las mismas fuentes.
Fuentes de este organismo reconocieron que aún reina la incertidumbre en torno a lo sucedido y que se desconoce si el explosivo era un cóctel molotov o una granada, como publican los diarios mexicanos.
El Ejército y la Marina mexicana investigan la naturaleza del artefacto.
El explosivo fue lanzado por desconocidos "dentro del bar" y explotó "casi en la mitad del mismo".
En lo que va de año se han recibido cinco alarmas de bomba en distintos lugares de Puerto Vallarta (la última en la madrugada del pasado sábado), de las cuales ninguna se había materializado.
Ayer, en cambio, no se registró ningún aviso, explicaron los funcionarios de Seguridad Pública.
Todavía no se han producido detenciones, pero la levedad de la mayoría de los heridos ha permitido tomarles ya la declaración a muchos de ellos y que la investigación "vaya muy avanzada".
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