SIMÓN BOCCANEGRA/TalCualDigital
En su Memoria y Cuento, el Presidente, comandante en jefe de la FAN, repitió siete veces la idea de que la FAN se cuadrará ante quien resulte vencedor en las elecciones de octubre, así no sea él. Además, añadió que por lo que a él mismo respecta, entregará la banda presidencial a quien la gane.
Pero es la primera idea la que nos interesa. La segunda se la hemos oído otras veces, pero que este minicronista recuerde nunca hubo en él una afirmación taxativa, categórica acerca de la obediencia de la FAN al mandato popular, como la realizada en su perorata de la semana pasada. El picado de culebra se asusta de un bejuco, y ya oigo comentarios escépticos o abiertamente burlones, negando que sean palabras sinceras. Ese no es el punto. Si son sinceras o no ya se verá pero por ahora constituyen palabra oficial y como tal debe ser tomada y permanentemente recordada por las fuerzas democráticas a la FAN.
Las fuerzas democráticas y su candidato no deben dejar que esas palabras se las lleve el viento. En toda oportunidad pertinente hay que traerlas a la conciencia de los venezolanos porque ellas constituyen un compromiso público del Presidente. Hacer juicios de intención sobre lo que está detrás de ellas es una manera de restarles la importancia objetiva que poseen. Chávez dijo que la FAN respetará un resultado electoral contrario a él.
¡Estupendo! Es de suponer que la FAN ha de tomar en serio las órdenes de su comandante en jefe. Sería muy bueno, ahora, que el nuevo ministro de la Defensa, general Rangel Silva, asuma públicamente igual posición y se desdiga de sus infortunadas declaraciones golpistas.
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