El rojo de la Furia se parece bastante al Vinotinto.
La España beisbolera tiene su corazón en Venezuela. Y así se refleja en la selección nacional ibérica que está buscando su cupo en el clasificatorio del Clásico Mundial de Béisbol del estadio Roger Dean de esta ciudad.
“Venimos de quedar terceros en el campeonato europeo y aquí llegamos reforzados principalmente con sangre venezolana”, reconoció Juan Carlos Cerdá, director de la federación de béisbol de España.
Uno de los responsables del tamaño del aporte vinotinto a este combinado nacional es Renny Duarte, un maracucho que ha jugado 13 temporadas en el béisbol venezolano y que se desempeña como coach de pitcheo de la Furia.
“Sabía que venían muchos venezolanos, pero igual me emocionó mucho llegar acá y encontrar a tantos jugadores de mi país”, apuntó Duarte, quien llegó a lanzar hasta Triple A. “Yo hice varios contactos con jugadores, con gente que podía estar acá. Hice esa parte de scouteo en Venezuela y Colombia”.
Duarte empezó a jugar en Europa en el 2003 con el conjunto del Bilbao y después se fue a Tenerife. En el 2010 tomó rumbo a Italia en donde es jugador y coach del equipo filial del Novara United. Además trabaja desde el 2009 con la federación española.
También en el 2003 recaló en España otro venezolano, el infielder Jesús Golindano, quien jugó una temporada en las Menores con los Dodgers de Los Angeles antes de ser dejado libre.
“Me dijeron que me viniera a España para tratar de regresar al béisbol organizado, pero al final me quedé. Recuerdo que cuando me dijeron para ir a jugar allá me dio risa”, admitió. “Cuando llegué el béisbol tenía un nivel más bajo del que estaba acostumbrado. Recuerdo que los partidos quedaban como 20-19. Ahora la liga ha mejorado y siento que uno es responsable de eso. Es una experiencia muy bonita saber que fuiste parte de ese mejoramiento”.
Golindano, quien juega para el Barcelona –actual campeón de España-, se casó con una española y desde el 2008 vive en ese país. De ella copió la forma de hablar, objeto de bromas de sus compañeros venezolanos en este seleccionado.
“Siempre están bromeando conmigo porque yo hablo con acento español. Incluso también lo hacen cuando hablo en catalán. Se burlan sobre todo cuando digo “ostia” o “qué pasa tío”, manifestó.
Richard Salazar, quien será el abridor en el segundo partido de España, vive en Venezuela, pero desde el 2007 está ponderando la idea de partir hacia Tenerife, de donde es su esposa.
“Es algo que tenemos pensado a futuro. De hecho, el año que viene tenemos planteado hacer un viaje para allá”, señaló Salazar, quien viene de actuar en un circuito independiente, la American Association con el conjunto de Sioux City. “Sabía que iba a encontrar varios venezolanos”.
Uno de ellos es Rafael Alvarez, un jardinero bastante conocido en la liga venezolana en la que ha jugado 18 temporadas y quien aseguró haber estado seleccionado para el Clásico Mundial del 2006 del que fue eventualmente sacado. “No se me dio esa vez, pero ahora tengo esta oportunidad de jugar este evento en la etapa final de mi carrera”, apuntó el toletero zurdo. “Una vez mi país me dejó afuera, ahora sé que vamos a clasificar”.
Y sí así sucede, será el talento venezolano uno de los principales responsables de ello.
El Nuevo Herald
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