Por LUIS F. SANCHEZ/lfsanchez@elnuevoherald.com
ROMA -- JOHANESBURGO- La eliminación del campeón Italia por la pequeña Eslovaquia el jueves en el Soccer City Stadium fue una nueva bofetada al fútbol europeo, que en Sudáfrica 2010 realiza una de sus peores actuaciones en los mundiales y sus grandes equipos han caído o están al borde del precipicio.
De los 13 clasificados del Viejo Continente se fueron seis: además de los azzurri y Francia, finalistas en Alemania 2006, quedaron eliminados Dinamarca, que el jueves perdió 3-2 ante Japón; el miércoles se despidieron Eslovenia y Serbia; y el martes dijo adiós Grecia.
A ello se suma el hecho que el próximo domingo hará maletas otra potencia de Europa, porque se enfrentarán en octavos de final Alemania e Inglaterra, debido a la opaca actuación de los inventores del fútbol, en un principio fuertes candidatos al título y dirigidos por uno de los entrenadores mejor pagados del mundo, el italiano Fabio Capello.
Inglaterra llegó apenas al segundo lugar en el Grupo C.
Por otro lado, la más grande vergüenza en la historia del fútbol francés se produjo en Sudáfrica 2010.
Todo empezó con una trampa: la clasificación de los blues al Mundial, en octubre pasado, con la ayuda de una mano de Thierry Henry. Y terminó con una imagen de mezquindad cuando el entrenador Raymond Domenech se negó a extenderle la mano a Carlos Alberto Parreira, luego que Sudáfrica venció 2-1 a los Blues el pasado martes en el Free State Stadium en Mangaung/Bloemfontein.
La expulsión de Nicolás Anelka de la selección por insultar al entrenador y la rebelión de los jugadores que se negaron a entrenar tras la salida de su compañero pusieron de manifiesto el amotinamiento de los blues que se tradujo en una pésima campaña mundialista.
Mientras, la eliminación de Italia desató la ira de los periódicos. "Desastre italiano'', tituló Il Giornale y "A casa con vergüenza'', exclamó la Gazzetta dello Sport.
Por lo menos, los integrantes de la squadra azzurra hicieron un mea culpa.
Gennaro Gattuso, uno de los campeones en el 2006, afirmó que tras quedar últimos y eliminados en el Grupo F, en el que eran favoritos, de seguro les harán "caballeros de la vergüenza''.
El entrenador Marcello Lippi, el mismo que llevó a la gloria al equipo hace cuatro años, se puso sobre sus espaldas el pesado bulto del fracaso.
"Asumo toda la responsabilidad, no tengo excusas'', exclamó del técnico. "Si un equipo tiene el terror en sus cabezas, en sus corazones y sus mentes y no es capaz de expresarse, entonces es que el entrenador no les preparó bien''.
Lippi llevó a Sudáfrica un plantel con nueve jugadores de 30 años o más.
La última vez que Italia fue eliminada en primera ronda en un Mundial ocurrió en Alemania 1974, pero antes había sido humillada por Norcorea, en 1966; y también en 1962 tomó el avión tras la fase inicial.
El derrumbe de las selecciones del Viejo Continente en el primer Mundial en suelo africano puede ser atribuido a la arrogancia, la acumulación de errores y al deseo de aferrarse a jugadores que peinan canas.
El único equipo fuerte que puede salvar a Europa de la debacle es Holanda, que tiene un récord perfecto en el Mundial y muestra un funcionamiento notable que hace honor a su apodo de la Naranja Mecánica.
España, considerado como el favorito del Mundial junto con Brasil, perdió en el debut. Jamás en 80 años de historia de la Copa el campeón ha caído en el primer partido. La Furia podría quedar eliminada hoy si no vence a Chile, en un partido extremadamente difícil. Portugal también puede mostrar una mejor cara con la presencia de Cristiano Ronaldo, pero hoy juega contra Brasil. Inglaterra o Alemania jugarán un partido de vida o muerte el domingo. Los demás son de menor potencia, como Suiza y Eslovaquia.
De los 13 clasificados del Viejo Continente se fueron seis: además de los azzurri y Francia, finalistas en Alemania 2006, quedaron eliminados Dinamarca, que el jueves perdió 3-2 ante Japón; el miércoles se despidieron Eslovenia y Serbia; y el martes dijo adiós Grecia.
A ello se suma el hecho que el próximo domingo hará maletas otra potencia de Europa, porque se enfrentarán en octavos de final Alemania e Inglaterra, debido a la opaca actuación de los inventores del fútbol, en un principio fuertes candidatos al título y dirigidos por uno de los entrenadores mejor pagados del mundo, el italiano Fabio Capello.
Inglaterra llegó apenas al segundo lugar en el Grupo C.
Por otro lado, la más grande vergüenza en la historia del fútbol francés se produjo en Sudáfrica 2010.
Todo empezó con una trampa: la clasificación de los blues al Mundial, en octubre pasado, con la ayuda de una mano de Thierry Henry. Y terminó con una imagen de mezquindad cuando el entrenador Raymond Domenech se negó a extenderle la mano a Carlos Alberto Parreira, luego que Sudáfrica venció 2-1 a los Blues el pasado martes en el Free State Stadium en Mangaung/Bloemfontein.
La expulsión de Nicolás Anelka de la selección por insultar al entrenador y la rebelión de los jugadores que se negaron a entrenar tras la salida de su compañero pusieron de manifiesto el amotinamiento de los blues que se tradujo en una pésima campaña mundialista.
Mientras, la eliminación de Italia desató la ira de los periódicos. "Desastre italiano'', tituló Il Giornale y "A casa con vergüenza'', exclamó la Gazzetta dello Sport.
Por lo menos, los integrantes de la squadra azzurra hicieron un mea culpa.
Gennaro Gattuso, uno de los campeones en el 2006, afirmó que tras quedar últimos y eliminados en el Grupo F, en el que eran favoritos, de seguro les harán "caballeros de la vergüenza''.
El entrenador Marcello Lippi, el mismo que llevó a la gloria al equipo hace cuatro años, se puso sobre sus espaldas el pesado bulto del fracaso.
"Asumo toda la responsabilidad, no tengo excusas'', exclamó del técnico. "Si un equipo tiene el terror en sus cabezas, en sus corazones y sus mentes y no es capaz de expresarse, entonces es que el entrenador no les preparó bien''.
Lippi llevó a Sudáfrica un plantel con nueve jugadores de 30 años o más.
La última vez que Italia fue eliminada en primera ronda en un Mundial ocurrió en Alemania 1974, pero antes había sido humillada por Norcorea, en 1966; y también en 1962 tomó el avión tras la fase inicial.
El derrumbe de las selecciones del Viejo Continente en el primer Mundial en suelo africano puede ser atribuido a la arrogancia, la acumulación de errores y al deseo de aferrarse a jugadores que peinan canas.
El único equipo fuerte que puede salvar a Europa de la debacle es Holanda, que tiene un récord perfecto en el Mundial y muestra un funcionamiento notable que hace honor a su apodo de la Naranja Mecánica.
España, considerado como el favorito del Mundial junto con Brasil, perdió en el debut. Jamás en 80 años de historia de la Copa el campeón ha caído en el primer partido. La Furia podría quedar eliminada hoy si no vence a Chile, en un partido extremadamente difícil. Portugal también puede mostrar una mejor cara con la presencia de Cristiano Ronaldo, pero hoy juega contra Brasil. Inglaterra o Alemania jugarán un partido de vida o muerte el domingo. Los demás son de menor potencia, como Suiza y Eslovaquia.
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