Un empujón del arquero suplente de Venezuela, Leo Morales, al defensor paraguayo Paulo Da Silva desencadenó una serie de golpes y choques entre jugadores al finalizar el partido en Mendoza, en el que el seleccionado "guaraní" se clasificó a la final de la Copa América.
Los incidentes comenzaron cuando Da Silva, en pleno festejo tras consumarse la clasificación en los penales, recibió un fuerte empujón de Morales al costado del campo de juego.
Ante la reacción inmediata de los paraguayos, el entrenador de Venezuela, César Farías, le dio un golpe de puño a un ayudante del cuerpo técnico de Gerardo Martino; y en la confusión posterior apenas si se divisó el enfrentamiento entre Nicolás "Miku" Fedor, de la "vinotinto", y Néstor Ortigoza.
El resto fueron golpes, patadas y la intervención de la policía para terminar con las peleas.
Este jueves, cuando se conozca el informe del árbitro mexicano Francisco Chacón, se sabrá si caen sanciones sobre los jugadores de cara a los partidos del fin de semana: la final ante Uruguay de los paraguayos el domingo y la pelea por el tercer puesto contra Perú, el sábado, en el caso de los venezolanos.
Cort. www.primeraedicionweb.com.ar
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