La ahora flamante procuradora general de la República, Cilia Flores, como buena discípula del nepotismo carga a todos los Flores como un jardín ambulante. De la Asamblea Nacional a la Procuraduría
La ahora flamante procuradora general de la República, Cilia Flores, como buena discípula del nepotismo carga a todos los Flores como un jardín ambulante. De la Asamblea Nacional ahora se mudaron para la Procuraduría 16 funcionarios en “comisión de servicios”.
Nada mejor que estar rodeado con el calor familiar y tener personal de confianza, tarea que se toma muy en serio Cilia, donde su más cercano círculo tiene nexos de sangre con ella y hasta los conocidos salen beneficiados.
Esos 16 mudados quizás ya no tengan problemas con la póliza de seguros del Parlamento, que por cierto pasó de una aseguradora del Estado a una privada, luego de las constantes quejas de los trabajadores de que los costos eran altos y el servicio pésimo.
NDO/TalCualDigital
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