Aldeas Infantiles denunció intervencionismo del gobierno venezolano

AAS/Globovisión/EFE

La ONG internacional Aldeas Infantiles ha criticado que su labor se vea dificultada por los intentos de los Gobierno de Venezuela y Nicaragua de intervenir en su labor de cooperación.

"En Venezuela es delicado porque el Gobierno lo quiere controlar todo", explicó a Efe Heinrich Müller, director para Latinoamérica y el Caribe de esta organización fundada en Austria en 1949.

Müller se refirió a la existencia de un proyecto de ley de cooperación internacional que, aseguró, pretende que los fondos de las ONGs tengan "que canalizarse a través de una entidad gubernamental".

"Ahí estaríamos muertos, porque nuestros donantes aquí no permitirían que le entreguemos el dinero al Estado para luego solicitarlo nosotros al Estado", advirtió.

Müller, que trabaja en Latinoamérica desde hace 30 años, indicó que esa tensión "se siente" y que incluso en alguna comunidad el personal de la organización ha sido expulsado.

"No hay ningún problema, nos retiramos. Eso ha pasado en otros países, en Vietnam, en Checoslovaquia, y después de 15 años volvieron", subrayó.

El veterano cooperante se refirió también al caso de Nicaragua, donde "hay un programa del Gobierno que trata de hacer lo mismo pero de forma estatal y es mucho más paternalista", anotó.

Por contra, Müller se refirió a la "excelente relación" con Ecuador y con Bolivia, países de los que la ONG recibe subsidios. Al respecto, Müller destacó que los países donde la organización trabaja "tienen derecho a controlar nuestros fondos, pero no a quererlos manejar".

"Hay transparencia. Tenemos convenios con ellos, ahí pueden influir en qué se va a gastar ese dinero", aclaró.

Respecto a la evolución de la situación de la infancia en la región, Müller dijo que los datos estadísticos hablan de la reducción de la mortalidad y de la mejora de los ingresos familiares.

"Son datos muy bonitos pero la realidad es diferente. La globalización ha empobrecido aún más a la gente en cuanto a su poder adquisitivo", denunció.

En ese sentido, explicó que está aumentando el número de "niños huérfanos sociales" por culpa de problemas como la violencia familiar y la drogadicción.

En ese sentido, indicó que está creciendo una situación que era más habitual en el mundo rico que en Latinoamérica donde, dijo, el problema era más la falta de recursos en "familias sanas".

En ese sentido, Müller se refirió a que ya desde 2003 Aldeas Infantiles tiene una estrategia global centrada más en el fortalecimiento familiar que en la acogida.

Así, se trata de apoyar a las familias con niños "en la creación de sus propias capacidades" para evitar el abandono. "Es un programa preventivo. El acogimiento es curativo, ya está hecho el problema".

Esta estrategia permite ahorrar costes y multiplicar por diez el número de niños que reciben ayuda.

En la actualidad, Aldeas Infantiles atiende en acogimiento familiar a 16.000 niños y adolescentes en 20 países de Latinoamérica y el Caribe, una cifra que se quiere elevar a 20.000 en los próximos seis años.

Respecto al programa de fortalecimiento, Müller indicó que el objetivo es elevar desde los actuales 50.000 hasta 18.000 el número de niños atendidos.