martes, 14 de septiembre de 2010

Para variar unos pequeños chistes, recuerden reir es salud

En Más información.... podrán disfrutar de los diversos chistes enviados por alguno de nuestros lectores, que lo disfruten.....


Enviado por: Jorge
Había una vez unas hormiguitas que estaban cansadas que un elefante les rompiera el hormiguero, cuando éste se acercaba a una planta para comer. Entonces, las hormigas se pusieron de acuerdo, la próxima vez que venga el elefante, nos subimos arriba de la planta y nos tiramos encima de él y lo picamos todo. Así sucedió, vino el elefante y las hormiguitas se subieron a la planta y se le tiraron encima y lo empezaron a picar. El elefante comenzó a sacudirse y se cayeron todas las hormigas, salvo una que quedó enganchada del cuello. Entonces, las otras hormiguitas le gritaban desde abajo:
¡Ahórcalo! ¡Ahórcalo!
_________________________________________________________________________

Enviado por Gabriela
Esta era una niñera que regresa de un paseo en el parque con el bebé, cuando llega a la casa la madre sorprendida ve que la niñera trae a otro bebé y angustiada le pregunta:
¿Que sucedió? ¿Por qué no trae a mi hijo y trae a este niño?
Y la niñera contesta:
Señora usted me ha dicho, si el bebé se ensucia lo cambia



_________________________________________________________________________

Enviado por Jeab
Una viejita esta afuera de una casa queriendo tocar un timbre, pero ella no lo puede tocar porque no lo alcanza, de repente llega un señor y muy amablemente se ofrece:
Señora, buenos días, ¿En qué puedo ayudarle?
Por favoorr jooven, aayudeme a tocarr el timbree.
Señora, con mucho gusto, le respondió.
Ya señora, y ¿Ahora qué?
La viejita le responde:
¡A correr!
_________________________________________________________________________

Enviado por Florencia
Habían tres amigos que se llamaban Tonto, Nadie y Ninguno.
Tonto va y le dice al policía:
Nadie se cayó al pozo y Ninguno lo está ayudando.
Entonces el policía le responde:
¿Usted es tonto?
Sí, ¡Mucho gusto!
_________________________________________________________________________

Enviado por Sergio
Erase una vez que Pepito se puso a vender huevos dentro de una iglesia:
¡Huevos, huevos, a 10 pesos cada uno!
Y el padre muy molesto grita:
¡Saquen a ese niño de los huevos!
Y Pepito asustado le dice:
¡Padre, mejor de la orejita!

    

No hay comentarios:

Publicar un comentario