Luego de que William Ojeda marcara distancia con la Unidad y sus derechos partidistas y su militancia fuera suspendida en UNT, el chavismo se ha desatado para defenderlo.
Mas allá de que la convocatoria a esa rueda de prensa haya salido del Minci, y que los medios oficiales se hayan regodeado en la ocasión, da risa ver a personeros del partido de gobierno defendiendo la "libertad de expresión" de Ojeda. Por ejemplo, la diputada Tania Díaz dijo que "es lamentable que William Ojeda sea víctima de descalificaciones no como político sino como persona.
Eso algo que en la Revolución no compartimos". No compartimos, lea bien, no compartimos. No les gusta, pues. Obvian que en el chavismo la exclusión galopante es regla y ley. El Gato Briceño, por poner apenas un ejemplo, ejerció su "derecho de expresión" para rechazar el manejo irresponsable del derrame en el Guarapiche. Botao. Henry Falcón usó su "derecho a expresión" para criticar la expropiadera en la zona industrial larense. Botao.
Como esos abundan los casos. Claro que el tema no es ni siquiera que los boten sino la parranda de insultos que lanzan: falso, vendido, traidor, cobarde, basura, inmoral, desgraciado, y mil más... Cada uno de los rojos dice uno, y el loco de medianoche de VTV los concentra todos. Tremendo ejemplo de no tener viga en el ojo propio, Tania.
Cort. TalCualDigital
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