Mi comentario de la semana
Nicolás Maduro no es Mohamed Mursi, pero no es descartable que muy cerca tenga a una revelación de Abdul Fattah al-Sisi. No estamos en El Cairo, porque muy al contrario de las areniscas, por acá ─como dicen en el llano─ sopla viento de agua; sin embargo, la cosa no está fácil. Aunque Maduro (mucho más rápido de lo esperado) le toma el paso a su condición de Presidente, prevalecen los intereses antipatriotas, unos inmersos en la intriga, y otros como presa fácil de los planes extranjeros de hacerse del poder en Venezuela. Gringos y cubanos nos han traído una réplica de la Guerra Fría (aquel enfrentamiento político, ideológico, económico, social, tecnológico, militar, informativo e incluso deportivo que Estados Unidos y la URSS escenificaron entre 1945 y 1991). Hoy Washington y La Habana se disputan a nuestro país como área de influencia. Mientras, en Miraflores se vive una nueva forma de transición que está más o menos relacionada con la revolución, pero que, al mismo tiempo no lo está, se tiene una novedosa manera de ir dejando de lado a los compañeros de ruta que Chávez escogió para llevar a cabo su proyecto revolucionario. Se falsea la conciencia revolucionaria por intereses económicos. Todo indica que Maduro (susurrado por algunos de sus adversarios como agente del G2) va a dejar de lado el estilo de Chávez de hacer política, sólo que lo hace transitando en un campo minado, donde para las fuerzas exógenas su figura es circunstancial y sólo cuenta para la transición con un papel similar al jugado por Alexander Kerensky en los sucesos que precedieron a la revolución bolchevique en 1917. Ahora mismo, la primera tarea difícil de Maduro es hacerse respetar en el mundo militar, siendo esta fecha de los ascensos la más apropiada para lograr ese objetivo; sin embargo, esa acostumbrada promoción anual de los grados castrenses está siendo muy vigilada en este mundo figurado de nuestra remozada versión de Guerra Fría. Washington y La Habana cuentan y buscan imponer sus nuevas fichas, todavía más, cuando ambos gobiernos, antagónicos entre sí, persiguen intereses muy bien definidos en nuestro país. Esos dos ejes buscan posesionarse en una eventual transición, quieren contarse. Con el incidente ocasionado tras impedir el sobrevuelo de la nave presidencial boliviana en su ruta por el cielo de algunos países europeos, Washington y sus aliados han enviado un mensaje a los gobiernos que en América Latina insisten en su mensaje antiimperialista. Entretanto, pescan en río revuelto: ellos, cubanos y estadounidenses convergen en Caracas porque avizoran un escenario similar al que se vive en las calles cairotas. Esas fuerzas foráneas juegan a la profundización de nuestra crisis y están a la espera de una erupción violenta en medio de un creciente descontento. Se trata de un conflicto donde se entremezclan las ambiciones, los ardides, las manipulaciones y servidumbre. Hay indicios para pensar que se busca por todos los medios crear un clima político agobiante. Pero, algo peor, además de los agentes de la CIA y el G2 en su actividad de agitación, hay muchos que trabajan por cuenta propia. Por allí pululan los gacetilleros de la política internacional añorando ver a Maduro como Mursi. Extraña apología donde Edgar Hoover se queda pendejo en su obra Maestros del Engaño.
DESTITUCIÓN. Por pronunciarse a favor de Luis Gallardo (ex gobernador de Guárico), fue destituido como presidente de la Comisión de Política Exterior el diputado Jesús Cepeda (PSUV). INTERCEPTADO. La grabadora es la culpable de la magnificación viciosa de la entrevista (Gabriel García Márquez). ¿Qué pensará el Gabo de quienes traicioneramente graban en secreto a sus interlocutores”. A mí, particularmente, me parece que sea quién sea el “interceptado”, quien lo graba es un potencial delincuente. PILLAJE. El boom dolarizado de un municipio. El Fondo Inmobiliario de Valores y Leopoldo López Gil (Padre de Leopoldo López Mendoza) serían los artífices del “reordenamiento” urbanístico de Chacao, ese donde se triplica la densidad de zonas residenciales para no sólo hacer aparecer como legales la gran cantidad de edificios construidos en menos de un año en ese municipio, sino además dejar el camino libre para la voracidad del FIV y el personaje antes mencionado. Aves de rapiña sobre Chacao puede llamarse el plan avalado tanto por el alcalde como por los concejales comprados para tal efecto. La Floresta, La Castellana y Altamira en la mira de la rapacería “urbanística”. CHUCKY. Nuestra Venezuela política es digna de la dimensión desconocida. Leo unas declaraciones del ministro Villegas y me sorprendo. Se trata del mismo personaje que cumplió un papel de primer orden en El Nuevo País cuando Poleo salió al “exilio” alegando ser un perseguido de CAP. Entonces EV (un natural y consumado antichavista) fue su mano derecha en el rotativo de Santa Rosalía. Hoy “se ha construido una imagen terrorífica de mí”, ha dicho con su sonrisa entre guasona y enigmática Gioconda. Quién sabe si como el muñeco de Don Mancini, Ernesto fue en verdad poseído por medio de magia vudú y eso le hace pensar en que es terrorífico. De Monalisa a Good Guy. FEUDO. Cuando Argenis Martínez, en su editorial de El Nacional (4/7/2013) titula Margarita Hundida, supongo que se refiere a la isla que el caudillaje adeco dejó en ruinas; a esa porción de tierra venezolana que los politiqueros convirtieron en su feudo por más de 20 años. No obstante, sí me extraña que Martínez omita el enriquecimiento súbito de quienes hasta llegar al poder eran pobres de solemnidad. ¿Un silencio comprometido? TRONCAL. Si hoy se celebraran elecciones para elegir al gobernador de Cojedes, el resultado acabaría con la hegemonía revolucionaria sostenida desde el año 2000 en ese estado llanero.
Todo porque uno de los peores gobiernos regionales es el presidido por Erika Farías. Los servicios y las vías de comunicación están en deplorable estado y hay municipios donde las interrupciones del servicio de agua potable llegan hasta más de 20 días. Otra: un derrumbe que data desde 2011 en la troncal 5 que une a Cojedes con Portuguesa y Carabobo se ha convertido en la caja chica de alguien (una especie de autopista de Oriente en diminutivo). DECORO. Una de las virtudes revolucionarias es la honestidad, sin ella no hay revolución. Particularmente que con la decisión tomada por la AN de investigar el audio de MCM permite que el decoro brille por su ausencia; no olvidemos que la bancada del PSUV (la que promueve la averiguación) antes se negó a aceptar una propuesta de la MUD, en el sentido de investigar el audio de Mario Silva. Definitivamente la credibilidad se jubiló del recinto legislativo. PRIVATIVA. Un reporte extraoficial da cuenta de la detención del general Frank Lares Rodríguez, encargado de la División de Logística de la Fuerza Aérea en 1997. El hecho ocurrió la semana pasada tras el allanamiento a su residencia. Lares Rodríguez es un general de división en condición de retiro. Se desconocen los motivos por los cuales el aviador fue privado de su libertad; sin embargo, a última hora supimos que ya se encuentra en su casa. FURTIVO. A la hora de investigar quién grabó a María Corina Machado, el primer sospechoso podría ser su propio interlocutor, el profesor Germán Carrera Damas. En el pasado el nombre del historiador salió de su acostumbrada aula universitaria cuando la prensa reseñó que era tío de Luis Carrera Almoina (conocido como El monstruo de Los Palos Grandes por el sonado caso Linda Loaiza). En esta ocasión, Carrera Damas vuelve a la palestra por el audio de MCM, difundido por Ernesto Villegas (muy allegado al autor del libro El culto a Bolívar). CURIOSIDAD. ¿Qué tendrán en común Yoani Sánchez, Heinz Dieterich, Eva Golinger y Edward Snowden? ANÉCDOTA. En 1998, bajo la presidencia de Fernando Miralles, en el canal 8, el periodista Walter Martínez era el único empleado de esa emisora que producía su programa en vivo. Miralles, al enterarse de que Martínez (muy afecto a los ejercicios militares) conservaba en su casa el uniforme de un oficial de la Gestapo como trofeo al cual le prodigaba admiración, lo conmino a editar Dossier, condición que el periodista aceptó a regañadientes. Su transmutación ha sido de 180 grados, cuando de simpatizante nazi hoy se presenta como un furibundo socialista.
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