DAMIÁN PRAT C./TalCualDigital
Guayana Solo un profundo descontento acumulado pero contenido por meses y años puede explicar el intenso y masivo paro laboral que protagonizan en Sidor unos 10 mil trabajadores, un evento que sorprendió tanto a los nuevos directivos militares de la empresa como a la directiva sindical pro oficialista, parte de la cual tuvo que incorporarse a la protesta luego de tres días, quizás para no ser arrastrados por el vendaval.
Hoy Sidor cumple 9 días de paro y las autoridades militares lanzan los acostumbrados boletines acerca de "se han dejado de ingresar 164 millones de bolívares durante el paro y se han dejado de producir 26 mil toneladas de productos de acero".
Detalle interesante, porque en otra época, antes que el actual gobierno arruinara la capacidad productiva de Sidor, en un paro laboral como el de hoy se habría dejado de producir en 8 días casi 100 mil toneladas de acero líquido.
Es una confesión indirecta de lo mal que "la revolución" ha dejado a Sidor tras cinco años de lo que ellos llaman "socialismo".
Los trabajadores, como es usual, garantizan los llamados "servicios mínimos" que impiden daños a equipos e instalaciones.
Lo cierto es que el paro tiene un detonante: el mal cálculo para el pago de la bonificación de fin de año, que en la Ley y en el contrato colectivo se le llama "utilidades" debido a una acta firmada en 2008 por la directiva roja rojita de la empresa recién estatizada, con la directiva del sindicato Sutiss, de la misma tendencia política.
La protesta comenzó con asambleas organizadas por los propios trabajadores, sin participación del sindicato, en Laminación en Caliente y en los trenes de Laminación de Barras (cabillas) y Alambrón pero en pocos días se fue extendiendo por toda la siderúrgica y sumó a las dos acerías de Planchones y Palanquilla, la planta de Pellas, las áreas administrativas, Laminación en Frío, etc.
Ese reclamo, seguramente potenciado por la difícil situación salarial y económica de los trabajadores, cuyo contrato colectivo tiene casi 3 años vencido y por tanto los ingresos igual tiempo congelados en un país que en ese lapso ha tenido una inflación cercana al 100%, sin embargo, tiene otras motivaciones que se han ido acumulando por la ruina a que ha sido sometida Sidor, el abandono total de las inversiones por parte del gobierno, el abandono del mantenimiento, graves problemas de seguridad industrial que han causado numerosos accidentes, serios problemas hasta de seguridad por atracos y robos dentro de la empresa, deterioro severo de servicios como comedor, transporte, así como los servicios de salud.
La masiva protesta, surgida espontáneamente en la base laboral, sorprendió a todos.
El presidente de Sidor, Javier Sarmiento, un general (GNB) declaró que no estaba en condición de tomar ninguna decisión y que debía esperar el regreso de Nicolás Maduro de su viaje a China y la ONU.
El general Félix Osorio, presidente de CVG, fue incluso al portón 3 de Sidor llevado por un ala de Sutiss y un sector del PSUV que objetan el paro, y allí dijo: "Lo importante es que nuestras empresas avancen y los trabajadores se comprometan".
Obviamente, muchos se preguntaron dónde estaba este general (que era ministro en otra área) cuando el gobierno nacional tomaba las peores decisiones que llevaron a Sidor a su estado de ruina y postración actual.
Por qué, entonces, estos ministros no "se comprometieron con Sidor y su avance", como ahora le piden a los trabajadores, sino que permitieron el deterioro.
El sindicato Sutiss también fue sorprendido por la reacción de la masa laboral. El presidente del sindicato, José Luís Hernández, pesuvista del MRO, al tercer día acudió a una asamblea y decidió sumar se al paro. Increpado por muchos trabajadores, admitió "el error" de haber firmado aquella acta que contravenía al contrato colectivo y aseguró que ahora acompañaría el reclamo.
Varios sectores político-sindicales, tanto de oposición como independientes, han acompañado la protesta desde el primer día. Un sector pesuvista, denominado Alianza Sindical, está en contra del paro.
Otro aspecto colateral en el conflicto, es que tras 13 meses aún no aparecen los $ 314 millones para inversiones que a fin de recuperar áreas productivas aprobó Chávez, en punto de cuenta, en la recordada asamblea y "cadena" que terminó abruptamente el 20 de agosto de 2012.
Ayer, al final de la jornada, el presidente de la CVG junto a un grupo de sindicalistas intentó quebrar el paro, pero no tuvo exito. La protesta sigue.
DATOS
Sidor produjo en 2007, último año antes de la estatización, 4 millones 300 mil toneladas de acero líquido. Produjo también 371 mil toneladas de cabillas a precio regulado. Arrojó ganancias por 704 millones de dólares,que se repartieron entre los socios: Ternium (60%), gobierno (20%), trabajadores accionistas B (20%). Le pagó 10 mil millones de bolívares en impuestos a la Alcaldía de Caroní.
En 2012, quinto año de administración roja rojíta, Sidor produjo tan solo 1 millón 700 mil toneladas de acero. Apenas 200 mil toneladas de cabillas. Arrojó pérdidas por 961 millones de dólares. No pagó impuestos. Tiene el contrato colectivo vencido por 3 años, y por tanto congelados salarios y beneficios igual tiempo. Venezuela importó de China 520 mil toneladas de productos de acero, que antes se fabricaban en Sidor.
Tavsa, planta asociada a Sidor, produjo en 2007, último año antes de su estatización y antes de ser adscrita a PDV-Industrial, 70 mil toneladas de tubos para la industria petrolera, 95% de los cuales compró Pdvsa, aunque no pagó. En 2012, tras muchos reclamos laborales exigiendo los dejaran producir, Tavsa fabricó 5 mil toneladas de tubos que Pdvsa no ha retirado ni cancelado.
Pdvsa, entre tanto, importa desde China (y en menor proporción desde Ternium México) todas sus necesidades de tubospetroleros, aunque por haberse convertido en una "caja negra", oculta la cantidad tanto a la AN como al país.
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