Hoy a las 11:30 am los trabajadores del diario tienen pautada una reunión con la empresa. Se rumora que pasará a manos chavistas y que el hermano del maestro Abreu sería el nuevo director del diario. Carlos Correa dice que con estas negociaciones se afecta el pluralismo y el derecho a la información
KEILYN ITRIAGO MARRUFO/ GÉNESIS HERNÁNDEZ/ DAMARINS DÍAZ/TalCualDigital
Los rumores que desde hace semanas habían circulado sobre la venta del diario El Universal cobraron mayor fuerza el día de ayer, cuando se conoció que incluso los trabajadores del diario fueron citados para este viernes a las 11:30 de la mañana a una reunión para anunciar presuntamente la decisión. "Información sobre el diario El Universal", fue la justificación de la convocatoria publicada en el correo interno enviado al personal.
El Sindicato Nacional de Trabajadores de la Prensa de Venezuela (SNTP) por medio de su cuenta en Twitter escribió que la gerencia del diario con 105 años de fundado confirmaba la venta. Más temprano el periodista Nelson Bocaranda columnista del rotativo había informado en su página web (Runrun.es) que los nuevos accionistas del impreso serán anunciados el sábado 5 de julio. De forma extraoficial, se señaló que la negociación habría sido por unos 90 millones de euros y que cerró en Madrid hace un mes. Además, también se dijo que supuestamente su nuevo director sería Jesús "Chucho" Abreu, hermano del maestro de orquestas José Antonio Abreu.
Con El Universal, son ya tres los medios de gran escala que desde el año pasado se han vendido a supuestos afectos al gobierno del presidente de Nicolás Maduro: Globovisión y la Cadena Capriles (Últimas Noticias, El Mundo y Líder). La poca transparencia en saber quién efectivamente puede estar detrás de la compra, a juicio del director de Espacio Público, Carlos Correa, genera una incertidumbre en quienes trabajan allí y en los lectores de los medios.
"Al día de hoy los trabajadores de la Cadena Capriles, hoy Grupo Últimas Noticias, no saben para quién trabajan, pero lo que sí es cierto es que hasta ahora los procesos que se han venido dando se han hecho de cara a cambiar sus líneas editoriales para posiciones menos críticas con relación a lo que está haciendo el gobierno y en ocasiones en detrimento de las posibilidades de hacer periodismo", sostiene Correa.
Recuerda que para que haya libre circulación de la información es importante que haya pluralismo, y dice que una de las obligaciones del Estado es garantizar que no haya mecanismos indirectos en la distribución de la publicidad y que haya espacios para que la gente diga lo que tenga que decir. "Estos procesos de compraventa se han traducido en un proceso de concentración de las perspectivas editoriales en la oferta de medios en Venezuela que está afectando el pluralismo y la diversidad, porque hay sectores que no pueden expresarse y con esto se está vulnerando el contenido del derecho a la información", agrega.
Para Correa el periodista es uno de los eslabones más débiles en estas disputas porque no es ni el propietario del medio ni el Gobierno, sino el que hace una propuesta de escrutinio del poder desde distintos espacios. "Cuando un medio como este se cierra tiene menos opciones de trabajo, menos posibilidades y por supuesto se generan condiciones para procedimientos como la autocensura o lógicas en las que la gente busca reconvertirse", manifiesta sobre los casos en los que trabajadores de los medios vendidos o han tenido que retirarse por diferencias irreconciliables o han optado por declinar en la crítica.
El secretario general del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Prensa, Marco Ruiz, en ocasión de la conmemoración del Día del Periodista, el pasado 27 de junio, había señalado que consideraba "gravísimo" que se estén dando negociaciones en medios de comunicación con una gran influencia en la sociedad en circunstancias de opacidad que no permite ni siquiera saber quién los está comprando ni a qué intereses económicos responden. "Lo que tenemos de certeza es que cuando uno analiza la línea editorial que han adoptado hemos concluido que es abiertamente a favor de un proyecto político. Entonces se ha invisibilizado a la mitad de un país", aseveró.
En días pasados Ruiz anunció la cruzada por la defensa ciudadana de la libertad de expresión y del derecho a la información, una iniciativa para convencer a los ciudadanos de que estos derechos no son privilegio de los periodistas. Son derechos de todos y para todos. El líder sindical cree oportuno, a raíz de los fuertes rumores de venta de El Universal, que la próxima semana se asista a una reunión para hacer equipos de trabajo y empezar esa cruzada en plazas, escuelas, barrios, entre otros espacios.
MENOS DIVERSIDAD
Carlos Correa, director de la ONG Espacio Público, asegura que actualmente 80% de los medios de comunicación son privados y 20% son públicos. No obstante, aclara que cuando se ve la perspectiva editorial y se analiza cuántos tienen posiciones críticas y grados de independencia con relación al poder, la proporción es exactamente al revés. Es decir, 8 de cada 10 medios son proclives a no hacer críticas al Gobierno o neutrales. "Y allí tienes una evidencia de que hay menos diversidad y que se ha perdido el átomo del periodismo".
CAMBIOS RADICALES
La venta de Globovisión se concretó el 13 de mayo del año 2013 y su nuevo dueño es Raúl Gorrín, propietario de Seguros La Vitalicia, junto con Juan Domingo Cordero y Gustavo Perdomo, también accionistas de la agencia de seguros.
La línea editorial que sostuvo el canal por más de 12 años ha cambiado definitivamente desde su venta. Su transmisión ahora parece ser más "equilibrada" y no con una tendencia opositora definida, como solía ser antes.
Desde que la dirección de esta televisora cambió, la retirada de los periodistas ha sido muy grande, al menos 49 empleados, en su mayoría anclas y reporteros, han salido del canal, entre los que se destacan Román Lozinski, Shirley Varnagy, Aymara Lorenzo, entre otros periodistas de esta planta. En la actualidad su parrilla informativa y sus programas son totalmente nuevos, y cuentan con caras jóvenes en cada uno de ellos.
LA VENTA Y SUS CONSECUENCIAS
A los pocos meses de la construcción de la imprenta moderna que fortalecería a la Cadena Capriles como un medio de comunicación nacional de trayectoria y mayor estabilidad, se anunció su venta, causando expectativa acerca de quién podría ser el posible comprador. Oficialmente, comenzó a operar bajo la mirada de Latam Median Holding, aunque se habló también del banquero Víctor Vargas, propietario del BOD.
Siendo el presidente de la junta directiva Carlos Acosta, designa en conjunto con la junta de directiva del Grupo Ultimas Noticias a Héctor Dávila Mendoza exasesor electoral del MVR, quien asumió labores como máximo responsable de Últimas Noticias, Líder, y El Mundo.
Antes ocupó el cargo el exgobernador de Anzoátegui, David de Lima, y la diputada oficalista Desirée Santos Amaral tuvo un puesto de asesora. Se estima que la venta de este medio con 70 años de trayectoria fue de 140 millones de dólares. En los últimos meses han renunciado varios periodistas al grupo, denunciando supuesta censura de sus trabajos.
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