MARIO SZICHMAN / Nueva York/ Especial para TalCual
¿Qué es una tormenta perfecta? Cualquier situación que se agrava de manera drástica por una combinación muy rara de circunstancias.
En el caso específico de un fenómeno meteorológico, la tormenta perfecta cuenta con tres elementos: una corriente de aire cálido proveniente de un sistema de baja presión, un flujo de aire frío y seco generado por un sistema de alta presión proveniente de la dirección contraria, y vientos húmedos proporcionados por un huracán.
En un reciente caso de corrupción administrativa, la tormenta perfecta en Wall Street fue causada por una corriente de aire cálido proveniente de la descomposición en las altas esferas del Bandes, Banco de Desarrollo Económico y Social de Venezuela.
El flujo de aire frío provino de Nueva York, donde opera la firma de corretaje Direct Access Partners (DAP) acusada de conspiración criminal para pagar sobornos a la vicepresidenta del Bandes, la venezolana María de los Ángeles González de Hernández.
El tercer elemento, la humedad tropical, fue proporcionado por la Security and Exchange Commision (SEC) que descubrió el fraude y causó un huracán que en vez de diseminar vientos y lluvia desparramó una enorme cantidad de excrementos.
Gracias a esa tormenta perfecta originada en el Bandes, existe ahora en Wall Street el caso de una podredumbre tan inmaculada que abre posibilidades de emprender reformas.
PRÁCTICAS CORRUPTAS
Duane Morris LLP es una firma global que cuenta con más de 700 abogados en Estados Unidos y a nivel mundial. La compañía venía advirtiendo desde el 2011 que era necesario aplicar con vigor la Ley de Prácticas Corruptas en el Extranjero (FCPA, The Foreign Corrupt Practices Act) tras una serie de investigaciones a empresas financieras y fondos de riesgo que mantenían sospechosas relaciones con instituciones bancarias en el extranjero.
Según un reciente alerta de Duane Morris LLP, el caso del Bandes podría ser "la tormenta perfecta" que permitiría al gobierno de Estados Unidos imponer con vigor los dictados de la FCPA.
El 7 de mayo de 2013, fiscales estadounidenses y miembros de la SEC (Securities and Exchange Commission, ente regulador de acciones y valores) anunciaron el arresto de varias personas, entre ellas la vicepresidenta del Bandes.
La fiscalía de Nueva York dijo que entre abril de 2009 y junio de 2010, la señora González recibió sobornos por un total de cinco millones de dólares, a cambio de asegurar el canje de bonos entre el Bandes y la firma de corretaje de corretaje neoyorquina DAP.
LA MENTIRA TIENE PATAS CORTAS
Al parecer, el ingrediente mayor en la tormenta perfecta fue el descaro y el neorriquismo de algunos implicados en el fraude del Bandes, que diseminaron su riqueza malhabida adquiriendo propiedades y depositando dinero en bancos de Estados Unidos y Suiza en lugar de actuar con discreción, como lo sabe el capo más insignificante de la mafia.
El diario El Universal de Caracas informó que la ex vicepresidenta del Bandes recibía parte de las ganancias "a través de una empresa constituida en Panamá, Cartagena International INC", que tenía cinco cuentas bancarias en Suiza.
José Alejandro Hurtado, intermediario entre DAP y el Bandes, recibió "honorarios" por seis millones de dólares. Su esposa, Haydee Leticia Pabón, consiguió otros 8,6 millones de dólares. Otro funcionario del Bandes, identificado por la SEC como CC1, recibía dinero a través de la empresa Hyseven.
El caso que podría traer cola es el del por ahora anónimo (o anónima) CC-1. La SEC ya había anunciado que se estaba investigando a otro banco venezolano.
Todavía la SEC no ha facilitado el nombre de la institución bancaria, pues le gusta mantener el suspenso. De todas maneras, no hay que ser paranoico para suponer que la ex vicepresidenta del Bandes tuvo cómplices. Nadie en ese cargo actúa sola, o se hunde sola.
Una persona con el talento demostrado por la señora González necesitó realizar una serie de trámites que requerían la firma, o la anuencia de otras personas, tanto en Venezuela como en Estados Unidos.
La SEC seguramente seguirá acercando el ventilador hacia el Bandes y DAP, y quizás surjan otros sospechosos. Las autoridades norteamericanas tienen la indelicada costumbre de ofrecer "deals" a algunos presos para capturar peces mayores. La señora González no luce como alguien capaz de incinerarse como un bonzo a fin de proteger a sus socios.
OJO PELADO
La firma global de abogados Duane Morris LLP ofrece a sus clientes una serie de sensatas recomendaciones para que no caigan en las redes tendidas por funcionarios corruptos en otros países.
Uno de los consejos es que antes de hacer gestiones con un funcionario extranjero se aseguren de "quien es el funcionario, y la manera en que lleva a cabo sus negocios". Es prudente, dice la firma, "realizar investigaciones" de quienes son los promotores e intermediarios antes de cerrar un negocio.
Para eso, las empresas interesadas no necesitan contratar detectives. Basta leer los periódicos de los países en que esas compañías desean hacer negocios.
Una simple búsqueda por Google en TalCual, en El Universal , o en El Nacional, les ahorrará tiempo y dinero. También pueden conseguir la versión impresa del audio que el servicio de inteligencia israelí le montó a Mario Silva.
Pues en numerosos casos es innecesario buscar una manzana podrida en un barril de manzanas. Especialmente cuando el barril está repleto de manzanas podridas.
Gracias al robo de dinero que pertenece al pueblo venezolano, no a su alcancía personal, algunos funcionarios del Bandes lograron crear la tormenta perfecta. Pronto, la tormenta va a llegar al ventilador. Y será más difícil para algunos prohombres y promujeres poner cara de yo no fui.
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