Cayó el primero/Por mi Madre miercoles 22may13

El arrebato de Mario y sus dos compañeros de programa en la última noche del espacio no fue más lamentable porque no fue más largo. Primero el hombre desmiente el audio que lo inculpa como chismoso asegurando que es un montaje y que ni siquiera pudieron mostrar un video, y lo hace con un comunicado grabado, sin imagen.


Luego aseguran que el Mossad recopiló 9 años de programas para construir frase por frase y palabra por palabra usando software que cualquiera puede comprar por Internet hasta alcanzar los 52 minutos. Si fuera tan fácil (o posible), ¿por qué no haberlo hecho con alguien de mayor peso como Nicolás, Diosdado o el mismo Chávez antes y después de muerto?

Ni hablar de cómo toda la explicación echa por tierra las mil grabaciones de llamadas pinchadas que él ha mostrado durante años en ese programa, todas ahora objeto de sospecha, de montaje, de programas gratuitos de audio. Luego dijo que él se ponía "a derecho", algo raro si considera que todo es mentira.

Pero lo mejor fue cuando dijo que salía del aire por cuestiones de salud cuando ni se acordaba de qué supuestamente padece, y mientras su teléfono sonaba con el mismo ringtone que escuchamos en la grabación. El Mossad es detallista. Lo cierto es que Mario es su propia víctima, se le acabó su poder gangsteril porque otros gángsters de cuello rojo pudieron más. Así le pagó el diablo.
TalCualDigital