Los científicos lograron la combinación de las moléculas amlodipina, hidroclorotiazida y valsartán para tratar a aquellos pacientes con hipertensión arterial de moderada a severa. Las pruebas demostraron un control superior de la enfermedad en noventa por ciento.
Para el cardiólogo Carlos Luis Galán, la aplicación de la triple terapia combinada amlodipina, hidroclorotiazida y valsartán constituye un "extraordinario avance de la farmacoterapia contemporánea", pues en una sola tableta se combina las tres moléculas.
"Es un producto con un adecuado perfil de seguridad y gran eficacia, cuyos componentes han sido extensamente estudiados. Su advenimiento augura éxito en los objetivos trazados, que son normalizar la presión arterial y contener el desarrollo de las complicaciones asociadas a la misma. Esta triple combinación disminuye eventos patológicos cardíacos, cerebrovasculares y renales", expresó durante la presentación comercial del producto, que en Venezuela sólo ha traido, hasta ahora, laboratorios Novartis.
Para el cardiólogo, la nueva triple terapia es un avance para el mejor control de la hipertensión. "Hay que enseñar a los médicos, pacientes y a sus familiares a emplear esta herramienta terapéutica", manifestó. También comentó que el cumplimiento del tratamiento es vital para obtener el resultado esperado, lo que se facilitará además al consumir una sola en vez de tres tabletas pues, según estudios de campo realizados con paciente, se demostró que mientras menos tomas y dosis deban ingerir, mejor cumplen su tratamiento.
La hipertensión arterial es una enfermedad crónica caracterizada por el incremento continuo de las cifras de presión sanguínea en las arterias, y debido a que sus causas están estrechamente ligadas al factor genético no siempre se puede prevenir, pero muchos factores relacionados con esta patología pueden ser prevenibles como consumo excesivo de sal, alta ingesta calórica, tabaquismo, inactividad y sobrepeso.
La hipertensión puede desencadenar enfermedades cardiovasculares, cerebrovasculares y renales por lo que debe ser tratada, observada y supervisada por especialistas con el objetivo de que no desencadene complicaciones graves que causen daños al paciente, por lo que se recomienda tomar la presión arterial a los niños a partir de los cinco años, y en los mayores de 18 años, una vez al año. Se debe recordar que es asintomática.
El Universal
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