Para las próximas elecciones de la Asamblea Nacional los demócratas están lidiando con el consabido ventajismo y abuso del poder del Gobierno que se ampara en un Consejo Nacional Electoral postrado a la voluntad de Hugo Chávez casi en su totalidad y en una Ley Electoral hecha a la medida para atornillar el Socialismo del Siglo XXI.
A la par también lidian con un conglomerado de partidos políticos, organizaciones civiles y dirigencia independiente extremamente heterogénea y divergente, donde cada uno tiene sus lógicas aspiraciones para postular candidaturas al cuerpo legislativo.
De allí que escoger a los candidatos de la unidad democrática a la Asamblea Nacional se ha tornado en un gran dilema. ¿Consenso o primarias? No existe una respuesta cierta que solucione ese dilema.
Para VenEconomía lo ideal sería realizar elecciones primarias en todo el país, pues este es el método de selección más democrático, equitativo y participativo. No obstante, no se puede pasar por alto que el secuestro dictatorial de las instituciones y el abusivo poder del Gobierno torpedean a las elecciones primarias y el recuerdo de la Lista Tascón, aun fresco, presenta un grave obstáculo: El factor miedo que inhibe a la población, no sólo en los barrios, sino en quienes tienen subsidios, trabajan o contratan con el Estado. Otro bemol es que las primarias requieren de una fuerte inversión de recursos, y los eventuales financistas también tienen miedo, no sólo de la Lista Tascón sino del Seniat, Cadivi, y otros entes represores del Gobierno. Por otro lado, para muchos el "consenso" representa más del mismo añejo e injusto cogollismo y ventajismo partidista. Para la Mesa de la Unidad Democrática es muy difícil satisfacer a todos los integrantes del conglomerado opositor. Es de recordar que existen mil y un candidatos potenciales que aspiran a las 165 curules parlamentarios. Ése es el juego democrático.
En diciembre de 2009 la MUD fijó unas reglas de juego consensuadas: Para los puestos nominales, se seleccionarían candidatos por acuerdos entre las partes en todas las circunscripciones electorales donde fuese ello posible. Y se irían a primarias en los circuitos donde hubiese dos o más candidatos con arraigo popular, para dirimir con votos cul tenía mayor apoyo. Y en las postulaciones por listas, la encabezaría un representante del partido más votado en las últimas elecciones.A la fecha la MUD ha tenido un gran avance para lograr los acuerdos en la mayoría de los 115 circuitos electorales que existen. Tan sólo están por definir las candidaturas en unos 10 circuitos donde se postula para unas ocho diputaciones. lamentablemente la importancia de las entidades a las que éstos pertenecen (Miranda y Carabobo) están causando un ruido pernicioso en la opinión pública y en la credibilidad de la dirigencia.Cabe recordarles que es hora de dejar de lado la intransigencia partidista y personalista si se quiere recuperar la institucionalidad democrática y el Estado de Derecho y de Justicia en Venezuela. El compromiso es con el país.
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