martes, 24 de septiembre de 2013

El honor no se divisa/Editorial TalCual martes 24sep13

Por: Xabier Coscojuela/TalCual
Cuando Juan Barreto ejerció el cargo de alcalde mayor afirmó que, ante la corrupción existente en la Policía Metropolitana, quería cortar por lo sano, pero no encontraba lo sano. Pocos años después esa corrupción extendida sirvió para justificar la eliminación de dicho cuerpo policial.


¿Habría que aplicar una medida similar con la Guardia Nacional? Dicen que no es correcto generalizar, pero realmente todo indica que la corrupción ha hecho metástasis en ese cuerpo militar.

No hay camionero en Venezuela que no haya tenido que “bajarse de la mula” en alguna de las alcabalas que “administra” ese cuerpo. Si las cargas no van precintadas, el pago se puede hacer en especies, de lo contrario es contante y sonante.

Lo que ocurre en las fronteras es otro indicio de que las malas artes se han hecho costumbre. Todos lo que habitan en los estados limítrofes los señalan de ser partícipes en el contrabando de extracción que allí se produce. No es que se hagan la vista gorda, sino que son actores muy importantes de dicho “negocio”.

Otra área de la vida nacional donde la actuación de la Guardia Nacional es muy cuestionable es en las prisiones.

El orden en dichos establecimientos es su responsabilidad y sería llover sobre mojado relatar las innumerables irregularidades que se producen en esos recintos ante la vista cómplice de los uniformados. ¿Alguno de ellos puede dar una explicación de por qué los presos están tan bien armados? ¿Pueden responder de manera satisfactoria cómo es que familias enteras viven dentro de esas cárceles? El último incidente ocurrido en al aeropuerto internacional de Maiquetía también los salpica. Todos los que viajan por ese terminal sufren las actuaciones, muchas veces abusivas, de los miembros de la Guardia Nacional. Su celo es particularmente grande con quienes viajan a Europa.

Sin embargo, la semana pasada un avión de Air France despegó de Maiquetía con más de una tonelada de cocaína en sus bodegas. No estamos hablando de una pista clandestina y perdida en los llanos, sino del aeropuerto más importante del país. Tampoco es la primera vez que una aeronave que parte de dicho terminal lleva una carga grande de droga. En el año 2006 en México fue capturado un avión con un alijo de cinco toneladas de cocaína que partió de ese aeropuerto. Como se ve los vuelos se repiten.

Estos hechos se suman a los señalamientos que se han realizado contra elementos de la Fuerza Armada y su supuesta relación con el narcotráfico. Acusaciones en las que no solo están incluidos miembros de la Guardia Nacional sino altos mandos del Ejército. No las damos por ciertas, pero cuando el río suena es porque piedras trae, y al parecer cada vez trae más piedras.

Sobre el último incidente la Fiscal anuncia una investigación, se informa de la detención de tres efectivos de la Guardia Nacional, pero realmente tenemos pocas esperanzas, por no decir ninguna, de que dichas investigaciones, como dice la manida frase, lleguen hasta sus últimas consecuencias. Seguramente habría que llegar muy arriba y la Fiscal parece sufrir de vértigo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario