jueves, 3 de octubre de 2013

Sidor sigue ardiendo

Huelgas en Sidor y Ferrominera. Asambleas de base decretaron reinicio del paro general. FMO mantiene confiscadas ilegalmente las prestaciones y debe casi 5 años al IVSS del dinero que descuentan. Gobierno provoca conflictos al desconocer acuerdos previos con sindicatos y trabajadores

DAMIÁN PRAT /Especial Guayana /TalCualDigital
El "frenazo" que sorpresivamente ordenó Nicolás Maduro en los acuerdos ya negociados y acordados con el caso del conflicto de Sidor provocó la reanudación de la huelga de mas de 10 mil trabajadores siderúrgicos a lo que se le suma que el incumplimiento severo por parte de Ferrominera a los acuerdos hechos hace tres meses desató un paro desde el pasado lunes en la extractora de mineral de hierro.

Tras una larga negociación de casi 12 horas el sábado, el sindicato Sutiss (o la fracción de éste que acompañó la protesta de los trabajadores de base) y la representación de Sidor, CVG y el gobierno, lograron un acuerdo que reconocía los reclamos de los trabajadores en cuanto a violaciones del contrato colectivo vigente, incluyendo el pago del retroactivo por 5 años de pago incorrecto, pero espaciado en varias partes de lo largo de los próximos 12 meses.

El acuerdo debía ser sometido a aprobación final de las partes. Los trabajadores de Sidor, en asambleas a las 11 de la noche del sábado y a las 7 am del domingo, lo aprobaron, reanudándose de inmediato las labores productivas.

La sorpresa ocurrió en la tarde del lunes cuando debía instalarse la mesa de diálogo Sutiss-CVG-Sidor para trabajar en los detalles del convenio.

Solo asistió un coronel de rango medio de Sidor quien transmitió el mensaje de que no existía ningún acuerdo formal y que "no hay dinero".

Para todos quedó claro que se trataba de "un frenazo", una orden de desconocer los acuerdos y que debía venir del máximo nivel de Miraflores.

En pocas horas las asambleas de base de los trabajadores en los laminadores, las acerías y todas las plantas, decretaron el reinicio de la huelga que ya para la mañana del martes era total.

Aunque algunos sindicalistas pro-gobierno han atribuido el asunto a "que a Maduro lo engañan", tal como antes se suponía que Maduro y otros "engañaban a Chávez", para la gran mayoría de los sidoristas es evidente que se trataba de una decisión política, quizás para provocar un conflicto político que le sirva al gobierno para tapar la dura crisis económica causada por años de destrucción de la producción nacional tanto estatal como privada y la ruina a que han sido sometidas tanto Sidor como todas las empresas básicas de Guayana.

Hasta la tarde de éste miércoles la situación en Sidor estaba totalmente estancada sin avance alguno ni diálogo. Los directivos de Sutiss que acompañan la huelga pese a ser pro-oficialistas, exigen la destitución del presidente de CVG, general Carlos Osorio y el regreso a Sidor del también general Noguera Pietri.

PARO TOTAL EN FERROMINERA
Luego de tres días de huelga en Ferrominera, el presidente de la empresa, general Zambrano Mata, apareció este miércoles en el portón con algunas propuestas para solventar el conflicto pero la asamblea de trabajadores de la seccional Puerto Ordaz consideró que buena parte de ellas eran insatisfactorias, sobre todo porque repetía promesas imprecisas, como las de hace tres meses que al ser incumplidas causaron este nuevo conflicto.

En junio pasado los ferromineros pararon la empresa por casi diez días hartos de las violaciones a su contrato colectivo (que además tiene tres años vencido igual que el de Sidor), la confiscación virtual de sus prestaciones sociales en los últimos 5 años, la pérdida de muchas conquistas sociales como los servicios médicos, los seguros, la caja de ahorros y el no-pago del mismo bono compensatorio por el retraso del nuevo contrato.

Un convenio hecho con Sintraferrominera en el cual la empresa y el gobierno se comprometieron a aportar semanalmente recursos para ir "poniendo al día" todos estos casos, así como las inversiones para rescatar la producción, puso fin a aquel conflicto, pero fue el detonante de este, toda vez que el gobierno incumplió casi todos los compromisos.

Ferrominera sigue manteniendo confiscadas ilegalmente las prestaciones. Le adeuda casi 5 años al Seguro Social del dinero que le descuentan al trabajador.

No ha cancelado el bono, los servicios de medicinas casi no existen, igual que el comisariato, mientras los hospitales de la empresa se encuentran en estado deplorable.

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